La número dos del mundo defendió exitosamente el título en el Australian Open, con una contundente victoria en la final sobre Zheng Qinwen por 6-3 y 6-2.
La consagración en el Australian Open 2024 será una de las más especiales dentro de la carrera de Aryna Sabalenka (N°2 del ranking WTA). Más allá de los números y los récords, la victoria en Melbourne esconde una promesa cumplida con su papá. Los detalles.
En noviembre de 2019, Sergey, padre de Aryna Sabalenka y ex jugador de hockey sobre hielo, moría a los 43 años de edad. Entonces, la número doce del mundo atravesó uno de los momentos más duros de su carrera.
"Fue inesperado porque era joven, tenía 43 años. No quería contarlo pero creo que la gente debe saberlo", explicaba la nacida en Minsk mientras vivía un triste período de su vida. Inmediatamente, impulsada por los objetivos que se había puesto con su padre, se encaminó en una dolorosa pretemporada que le sirvió para aliviar el dolor de la pérdida.
El objetivo que se habían planteado con su padre era llegar al número uno y ganar un par de Grand Slams para los 25 años. Y, desde aquella despedida, la bielorrusa inició un camino espinoso con triunfos y caídas que finalmente desembocaron en la conquista de esa inmensa meta. Nueve de sus catorce títulos, dos Grand Slams en Australia y el número uno durante la temporada pasada sirven como mensaje a su padre: lo logró.
Por esa razón, disputando su último Grand Slam con 25 años, celebra esta victoria en Melbourne Park sobre Zheng Qinwen como una de las más importantes de su carrera luego de largas temporadas entre las mejores del mundo. Después del punto que le dio la consagración, lanzó un beso al cielo y, posteriormente, en la ceremonia de premiación agradeció a su familia: "Todo lo que hago es por ustedes".