Primer Grand Slam como número uno del mundo. Ese es el reto que le depara a Jannik Sinner en este Wimbledon que le abrió sus puertas al número uno del mundo desde la finalización de Roland Garros.
En el tercer Major del año, el italiano podría lograr algo que jamás consiguió ningún jugador del Big Three... y tampoco Carlos Alcaraz, su gran rival generacional y con quien podría escribir una nueva página dorada de este deporte en Londres. ¿Por qué? Ni Roger Federer (que estrenó su palmarés en Wimbledon 2023 y no volvió a ganar un Grand Slam hasta el año siguiente, en Australia 2004), ni Rafael Nadal (que se estrenó en París, en 2005, pero no conquistaría un Grand Slam diferente hasta precisamente ganar Wimbledon en 2008) ni Novak Djokovic (que inauguró su casillero en Australia 2008 pero tardaría tres años más en volver a ganar) fueron capaces de darle continuidad a su primer Grand Slam en el mismo año.
El sorteo fue traicionero con el italiano y es que, pese a que la primera ronda sea contra Yannick Hanfmann, la segunda le podría enfrentar a Matteo Berrettini, finalista en Stuttgart este año y en Wimbledon en 2021 o a Marton Fucsovics. Además podría toparse en tercera ronda con Tallon Griekspoor, que lo tuvo contra las cuerdas hace una semana en Halle.
En octavos, lo espera el sudamericano de potente saque Nicolás Jarry o Ben Shelton, y en cuartos de final un tal Daniil Medvedev.
Carlos Alcaraz en semifinales (buscando revancha de Roland Garros) y Novak Djokovic el 14 de julio serían el cuadro perfecto. Con él levantando la copa rezarán en San Cándido, ese municipio de la provincia autónoma de Bolzano, región de Trentino, de poco más de 3 mil habitantes donde están sus raíces italianas.