La leyenda de Juan Martín del Potro en el deporte argentino se creó en los inicios del tandilense en el circuito profesional, donde rápidamente estuvo entre los mejores del mundo. De hecho, a sus 20 años se consagró campeón del US Open. Además de lo conseguido en su carrera, sumado al logro histórico de la Copa Davis 2016, Delpo dejó una huella imborrable en los Juegos Olímpicos.
En Beijing 2008 no formó parte de la competición debido a que ya se había ocupado el límite de tenistas de Argentina que podían decir presente en el main draw. Por esta razón, su debut en los JJOO se dio en Londres 2012, con sede en Wimbledon, nada más y nada menos. Y su participación no iba a pasar desapercibido...
En su estreno, derrotó al croata Ivan Dodig en sets corridos. Luego, sus víctimas fueron Andreas Seppi (Italia), Gilles Simon (Francia) -en tres parciales- y Kei Nishikori (Japón), previo a enfrentarse en semifinales contra Roger Federer. Ese partido, que aseguraba medalla y un lugar en la final, iba a ser el más largo en la historia de los Juegos Olímpicos en tiempo (cuatro horas y 26 minutos).
Lastimosamente para Juan Martín, el triunfo iba a ser para el suizo por 3-6, 7-6 (5) y ¡19-17!. De esta manera, Del Potro tuvo que salir a la cancha al poco tiempo, y sin descanso, para enfrentarse a Novak Djokovic (Serbia) por la medalla de bronce. Contra todo pronóstico, JMDP se impondría por 7-5 y 6-4 para subirse al podio.
"Estaban esperando en el podio al ganador del bronce. Todos creían que iba a ser Djokovic y llegué yo. Federer me preguntaba qué había pasado y cuando le conté que gané, me dijo: 'Qué felicidad, me pone muy contento después de nuestro partido'", había dicho el argentino luego.
Cuatro años después, y una gran cantidad de lesiones y operaciones (de ambas muñeca) de por medio, La Torre de Tandil buscaría una nueva épica en los Juegos Olímpicos de Río 2016. Sin embargo, en la primera ronda le iba a tocar Novak Djokovic, número uno del mundo en aquel momento.
En una verdadera historia olímpica, que fue directo a los libros más dorados del deporte argentino, y tras dos horas y 27 minutos de juego, Del Potro jugó el mejor tenis de su vida y se impuso por 7-6 (4) y 7-6 (2), sin haberle concebido ni una chance de quiebre a Djokovic.
Con este envión, el ganador del US Open siguió compitiendo y se situó en la semifinal tras derrotar luego a Joao Sousa (Portugal), Taro Daniel (Japón) y Roberto Bautista Agut (España). Allí, el destino lo iba a poner cara a cara con Rafael Nadal. En un cotejo donde reinó la paridad, y donde se daría empate en caso de estar la posibilidad, fue el sudamericano quien se hizo más fuerte en el tiebreak de set final: 5-7, 6-4 y 7-6 (5).
Historia pura. Delpo ya había asegurado su segunda medalla en su segundo Juego Olímpico. Con el poco combustible que le quedaba, cedió en la definición ante Andy Murray, quien lo derrotó por 7-5, 4-6, 6-2 y 7-5 (el de Tandil estuvo 5-3 arriba en el cuarto set).
Y así se iba el último partido de Del Potro en JJOO.