Vigencia. Esa es la palabra clave para definir a Novak Djokovic. El actual número dos del mundo, llegó a París en busca de su primera medalla de oro en los Juegos Olímpicos y quedó a tres partidos de lograrlo, rompiendo récords en el camino, como acostumbra a hacerlo.
El serbio, derrotó en octavos de final a Dominik Koepfer y se convirtió en el primer tenista hombre de la historia en instalarse entre los ocho mejores de la cita olímpica en cuatro ediciones diferentes.
La primera vez que el nacido en Belgrano alcanzó los cuartos de final en los Juegos Olímpicos, fue hace 16 años en Beijing, cuando se estrenó en este torneo. Por aquel entonces, fue semifinalista, instancia en la que cayó con Rafael Nadal y luego se quedó con la medalla de bronce al derrotar a James Blake en el partido por el tercer puesto.
Cuatro años más tarde, en Londres 2012, volvió a avanzar hasta la semifinal y nuevamente fue derrotado aunque esta vez ante Andy Murray. El 24 veces campeón de Grand Slam, no logró "retener" la presea de bronce, ya que sucumbió a manos de Juan Martín del Potro.
Tas el fracaso en Río 2016, donde llegó como máximo favorito y fue derrotado nuevamente por Delpo, pero en primera ronda, en los Juegos de Tokio 2020 volvió a meterse entre los cuatros mejores. Sin embargo, fue Alexander Zverev quien lo frenó en esta oportunidad y posteriormente, perdió de manera sorpresiva ante Pablo Carreño Busta en el duelo por el tercer lugar.
Finalmente este 2024, buscará romper esa "maldición" y alcanzar la medalla dorada que tanto desea. Claro que para eso, primero deberá derrotar a Stefanos Tsitsipas, su próximo rival en cuartos de final.