Hablar de Diego Maradona solamente como futbolista, sería faltarle el respeto a un fiel seguidor todo el deporte argentino, incluyendo en tenis, al punto de estar presente en Zagreb en 2016, cuando Argentina saldó una deuda con la historia al levantar por primera vez la, hasta ese momento esquiva, Copa Davis.
Diego, quien este 30 de octubre cumpliría 64 años, estuvo en toda la serie ante Croacia y en aquel momento relató en carne propia su experiencia en un largo posteo en su cuenta de Facebook.
"Quería contarle a los muchachos de la página, mi experiencia en esta Copa Davis, en Croacia, la primera para mi país. No me afeité. Le pedí permiso a mi vieja, desde el cielo, para jugar la Copa con la barba, por cábala. Esto se los cuento a todos Ustedes, se lo cuento a Benjamín, a Dieguito Fernando, a Lu, a Belén, a Jana, a Gianinna, a Dalma, a Diego", comienza el relato del capitán argentino en la Copa Mundial de Fútbol 1986.
Lo que muchos no sabían era que Maradona había llegado a tierras croatas sin entrada para el torneo, pero por obra de Diego Gutiérrez, por aquel entonces Vicepresidente de la Asociación Argentina de Tenis, pudo estar en la cancha. "No tenía entradas, pero Maradona no las necesitaba. Logré conseguirle el palco al que finalmente fue y le expliqué que ahí iba a estar tranquilo, podía mirarlo, festejar, tenía catering, de todo. ‘Gracias hermano, sos un fenómeno’, me respondió", explicó Gutiérrez, quien también reconoció que el propio ex Boca se comportó de una manera muy respetuosa con el equipo.
En esa serie, Argentina comenzó abajo por el triunfo de Marin Cilic ante Federico Delbonis, aunque luego igualó Juan Martín del Potro con la victoria ante Ivo Karlovic, pero nuevamente los croatas se adelantaron el sábado gracias a Cilic y Dodig, quienes se impusieron sobre Delpo y Mayer.
"Delpo y el Yacaré se quedaron haciendo masajes en la cancha, y yo me quedé en el octavo piso, con los otros masajistas, con Guido Pella, con Delbonis y con el resto de los muchachos. Y les hablé de fútbol, que es mi palo. Traté de darles confianza, porque al perder el dobles, nos quedaban dos oportunidades que no podíamos perder", relató Maradona.
Los argentinos llegaron abajo al domingo y todo parecía negro, cuando Cilic se puso 2-0 en sets sobre la Torre de Tandil, que hizo el milagro y revirtió el encuentro para emparejar nuevamente la serie. "Hoy Cilic jugó Top-5, no Top-10. Hay que sacarse el sombrero con un argentino que, sufriendo los embates de Cilic, respondió todo. Lo cagó a pelotazos", explicaba Diego a su manera.
Y fue Federico Delbonis el encargado de cerrar aquella gesta histórica "haciendo lo que quería con Karlovic cuando le adivinaba el saque", en palabras del propio Maradona, quien destacó la humildad del equipo, además de resaltar la conducción del capitán Daniel Orsanic.
Lo que significó para Del Potro la presencia de Maradona y el "impagable regalo"
"Diego fue un gran amante del deporte argentino. Seguía a cada atleta, cada disciplina que él podía. Él se fue a Croacia a la final de la Copa Davis, que él también sabía que Argentina nunca la había conseguido, que habíamos perdido finales y todo. Pero bueno, él estuvo ahí todos los días y fue súper respetuoso", explicó el ganador del US Open 2009, en diálogo con el podcast oficial del Masters 1000 de Madrid.
Pero eso no fue todo lo que contó Juan Martín, ya que también reveló que entró al vestuario a festejar la obtención del título y le hizo un pedido muy especial al propio Delpo. "Cuando ganamos se mete al vestuario ahí con nosotros y viene, me saluda. Yo le doy mi camiseta con la que había ganado para que la tenga, porque él juntaba cosas de todos los deportistas. Bueno, me la recibe, me da las gracias. Me dice: 'La voy a guardar en un lugar muy especial, pero dame la raqueta'. Así que también le doy la raqueta, se llevó la camiseta, la raqueta y todo lo que Diego quería, había que entregarlo", concluyó el ex N°3 del mundo.
Está claro que Maradona fue un grandísimo jugador, pero también un extraordinario seguidor del deporte argentino, que se mudó a otro plano, pero que a pesar de todo, sigue viviendo en los corazones de todos los deportistas albicelestes.
¡Feliz cumpleaños, Pelusa!