Estrenando oficialmente hace unas semanas en el Argentina Open, el Live Electronic Line Calling aún continúa dando sus primeras armas en el circuito masculino, recibiendo más críticas que elogios hasta el momento, tal como la feroz critica que lanzó el local Nicolás Jarry (45°) este martes en primera ronda del ATP 250 de Santiago.
Luego de imponerse 7-5 en la primera manga frente al albiceleste Camilo Ugo Carabelli (69°), reciente semifinalista en el ATP 500 de Río, el pupilo de Juan Ignacio Chela bajaría drásticamente su nivel en el segundo set, etapa en que conectaría una devolución cerca de la línea estando abajo 4-2 (40-30), generando que la tecnología la cante como mala para cederle el game a su rival en el segundo turno en el court central Jaime Fillol.
Inmediatamente, el dueño de tres títulos en el Tour, campeón en su casa en 2023, arremetería contra el juez de silla, incrédulo por el fallo y la repetición del pique en la pantalla: "Mira esa pelota, no no no. Esto es una falta de respeto, ¿100.000 dólares para esto? Es malísimo el video, es falso. Es un video falso, esto es la realidad".
"100.000 dólares para nada. Mírala. La ves buenísima tú, todo el mundo la ve buenísimo. Está mitad adentro, mitad afuera. ¿Para qué hacen estos cambios?", prolongaría el ex número 16 del mundo, que no lograría su cometido con su airoso reclamo, pegándole un raquetazo a su bolso para descargar al menos un poco la ira contenida.
Cabe destacar que en la misma jornada ocurriría una situación similar en la cancha 1, donde el polémico francés Corentin Moutet (65°) tampoco aceptaría la sanción del novato Ojo de Halcón sobre polvo de ladrillo, tomándole una fotografía al pique y mostrándoselo a su rival, el bosnio Damir Dzumhur (90°), y al supervisor, previo a recibir un point penalty y ceder 6-2, 3-6 y 6-3.
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