Después de una dolorosa derrota por 21 puntos ante los Cleveland Cavaliers el domingo en casa, el presidente de los New York Knicks, Steve Mills, y el gerente general Scott Perry se dirigieron a los medios para expresar su descontento con los problemas del equipo.
"No estamos contentos con el lugar en que estamos", dijo Mills. "Aquí no es donde esperábamos estar en este punto, tras 10 juegos".
La derrota del domingo puso a los Knicks con balance de 2-8 en la temporada. Fue su tercera derrota por al menos 20 puntos en los últimos cuatro juegos y la segunda en el Madison Square Garden en ese lapso.
Los Cavs abrieron la segunda mitad con una racha de 18-6 y superaban a los Knicks hasta por 30 puntos en el tercer cuarto. Después de una rápida bandeja de Collin Sexton con menos de siete minutos por jugar en el cuarto, los fanáticos abuchearon a los Knicks.
Perry dijo que al equipo le ha faltado consistencia en su esfuerzo.
"Creo que la falta de consistencia, eso en la mayor parte que hemos visto, pero también se ven esfuerzos esporádicos", apuntó Perry. "De eso hablamos cuando nos sentamos durante este juego y una de las razones por las que queríamos salir y hablar con ustedes. Porque debemos ser consistentes en todas las áreas del juego, comenzando con el esfuerzo".
A pesar de las dificultades, Mills dijo que la oficina central todavía cree en el entrenador David Fizdale.
"Tenemos paciencia y creemos en el entrenador", indicó Mills. "Y creemos en el grupo que formamos, pero también sabemos que, como Scott y yo hemos dicho varias veces, necesitamos encontrar una manera de tener un nivel constante de esfuerzo y ejecución".
"Tengo que reconocer que nuestra consistencia en casa no está ahí", afirmó Fizdale después del partido. "Asumo toda la responsabilidad por eso".
Los Knicks no necesariamente tenían expectativas de playoffs esta temporada después de no conseguir un gran agente libre en la temporada baja, pero se esperaba que fueran más competitivos que la temporada pasada (17-65), cuando fueron el peor equipo de la liga. Hasta ahora, ese no ha sido el caso.
"No estamos aquí centrados en el récord", aclaró Mills. "Estamos enfocados en mejorar y ofrecer un esfuerzo constante porque creemos que, si este equipo juega con el tipo de esfuerzo que jugaron contra Dallas, ganaremos juegos de baloncesto".
Antes de enfrentar a Cleveland, los Knicks jugaron contra los Mavericks el viernes, obteniendo su segunda victoria de la temporada en el primer partido de Kristaps Porzingis contra su antiguo equipo.
Adquisiciones fuera de temporada, Marcus Morris Sr. (29 puntos) y Julius Randle (21) lideraron al equipo en anotaciones en la victoria 106-102.
"[Mills y Perry tienen] razón. Necesitamos ganar", remarcó Morris después de la derrota del domingo. "Tenemos grandes jugadores. Tenemos una gran química. Tenemos grandes muchachos en este equipo ... Si estuviera en la oficina principal, yo también estaría molesto. Nuestros entrenadores están haciendo un gran trabajo. Simplemente tenemos que ser mejores.
Ellos no son los que dan 20 puntos de ventaja en el comienzo de la primera mitad. Esos somos nosotros. Todo depende de nosotros, y tenemos que ser responsables".
Mills comentó que el dueño del equipo, Jim Dolan, todavía cree en el plan que él y Perry tienen en marcha, pero quiere ver mejores resultados en la cancha.
"Él es tan apasionado como nosotros por esto", subrayó Mills. "Así que él querría que tuviéramos mejores resultados en la cancha también. Y creo que Jim es un fanático y cree en lo que estamos haciendo, pero tiene el mismo tipo de expectativas que nosotros".