El jugador se vestirá por primera vez junto a los Gigantes del Cibao desde la postemporada de la pelota invernal dominicana de 2016.
Tras una prolongada ausencia de la Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana (LIDOM), Nelson Cruz se volverá a uniformar con los Gigantes del Cibao. El poderoso bateador designado de Grandes Ligas ha realizado un compromiso de disputar al menos un encuentro en cada estadio, como una forma de despedirse de la pelota invernal. Sin embargo, sobre su futuro como beisbolista profesional, habrá que esperar.
Inicialmente, Cruz comentó en múltiples medios dominicanos que todavía no tiene planificado cuándo se reportará a los Gigantes, así como tampoco sabe en qué momento, exactamente, anunciará cuál es su próximo paso como jugador. Sin embargo, en una conversación con el programa radial ZDeportes, el dominicano dijo que cualquiera que sea su decisión final, esta será anunciada a través de una rueda de prensa.
Posteriormente, Cruz ha dado información más concisa sobre en qué momento anunciará su próximo paso, apuntando a que la decisión llegará después de que juegue con los Gigantes.
“Vamos a esperar a ver qué pase en la temporada y ahí tomaremos la decisión (…) cuando pase la temporada vamos a tomar la decisión”, dijo el jugador a Diario Libre, al tiempo de admitir que con cada año que ha transcurrido de su carrera, se ha hecho más difícil para él adaptarse a lanzadores que tiran cada vez más rápido.
Un estudio de Inside Edge colocó la velocidad de la bola rápida de cuatro costuras en MLB durante el año 2005, año en que Cruz debutó, en 90.1 millas por hora (mph) y ese año, solo siete lanzadores superaron una media de 95 millas por hora en dicho lanzamiento. En 2022, la misma bola rápida promedia las 93.9 mph, mientras que un total de 3,356 lanzamientos que superaron las 100 mph, según explica el referido estudio.
Cruz indicó que esto se ha vuelto un verdadero reto profesional en la parte final de su trayectoria profesional con 43 años. “El aumento de velocidad aumenta los rompimientos de pitcheos, la dificultad, el tiempo de reacción es mucho menor, en sentido general se ha dificultado mucho más”, dijo al respecto a Diario Libre, lo que pudiese inclinar la balanza a una decisión de "colgar los spikes".
Sin embargo, Cruz también admitió que, a pesar de dicha dificultad, recibió múltiples ofertas de varios equipos de MLB, mismas que rechazó de momento por no alinearse con lo que estaba buscando.
“Hubo varias ofertas, pero no era lo que me atraía o lo que yo quería; entonces, uno como jugador a veces entiende que se sacrifica más por el equipo y en este caso entendí que no era necesario hacerlo”, sentenció “Boomstick”, quien solo jugó 49 partidos en 2023.
Lo que depara el futuro para Cruz, solo lo sabe él en estos momentos, pero tomando en cuenta que su rendimiento ofensivo ha disminuido en las dos últimas temporadas, no es descabellado pensar que el final del camino está cerca. Si a esto se le suma que Cruz ya empezó a explorar otras opciones dentro del mundo del béisbol, como ser gerente de la Selección Dominicana que fue al Clásico Mundial de Béisbol, hace sentido que se piense que las probabilidades de retiro, en este punto de su carrera, son elevadas.