PHOENIX -- La selección mexicana de béisbol llegó, vio y venció en el Grupo C. Y está listo para disputar en Miami la ronda de eliminación directa del Clásico Mundial de Béisbol.
México venció a Canadá 10-3 y aseguró el primer lugar de su grupo en el Chase Field de Phoenix, Arizona, con el boleto a cuartos de final, donde enfrentará a Puerto Rico, que el miércoles eliminó a Dominicana.
"Esto sólo fue parte del proceso", dijo el primera base mexicano Joey Meneses. "Nosotros lo hemos dicho desde el día uno, venimos a competir por un campeonato, pero primero tenemos que ir avanzando por cada fase".
La primera ronda fue un éxito que superó la mayoría de los pronósticos en un sector donde Estados Unidos era el claro favorito. Más aún, después de que México perdió en su presentación ante Colombia.
A partir de ahí, ya nunca volteó para atrás en sus siguientes partidos, en los que venció precisamente a los "locales" estadounidenses, Gran Bretaña y Canadá, con una evidente mejoría entre cada uno de sus triunfos en bateo y pitcheo.
"Sí este equipo hizo click en el clubhouse desde el primer día", comentó Meneses. "Eso ayuda a que cada vez nos entendamos mejor en el terreno de juego. Hay demasiado talento en todas las posiciones y conforme pasa el tiempo vamos entrando en un mejor ritmo de juego".
Mucho se habló del staff de pitcheo mexicano como la principal fortaleza, encabezada por sus abridores y después el cuerpo de relevo. Pero la mayor revelación del torneo para México ha llegado con los bates.
Randy Arozarena produjo cinco carreras este miércoles contra Canadá con par de dobletes, para llegar a nueve e imponer una nueva marca mexicana en Clásicos Mundiales. Él promedia con el madero .500 en cuatro partidos.
Meneses batea para .474, incluidos sus dos sencillos contra los canadienses, que resultaron en una carrera empujada para sumar siete producciones. Rowdy Téllez sufrió en su presentación, pero después de la derrota contra Colombia se convirtió en uno de los mejores bateadores para México como designado.
"Esos son nombres que uno espera que bateen", dijo el mánager Benji Gil. "Pero este equipo, que se está convirtiendo en una familia, ha tenido ayuda de todos. Hasta nuestros catchers han bateado, corrido, y sobre todo dirigido a nuestros pitchers".
"No me sorprende", agregó. "Nosotros sabíamos a qué veníamos y de qué somos capaces. Estamos muy contentos de lo que hemos logrado hasta ahora, pero no hemos terminado. No estoy satisfecho todavía. Dimos el primer paso. Aún necesitamos tres pasos más".
Arozarena, quien rápido se convirtió en el favorito de los aficionados mexicanos que fueron mayoría en el estadio en cada uno de sus cuatro partidos en la fase de grupos, dio crédito al mánager Gil por el juego de equipo.
"Benji es el mejor mánager y más ganador de México", afirmó. "Eso lo sabía desde que estuve jugando en Tijuana. Ahora me doy cuenta por qué... Sabe tratar a todos los peloteros, poner un gran plan de juego, tomar decisiones... Más importante, sabe cómo unir al equipo".