Justo cuando muchos pensaron que Julio Urías había alcanzado el tope de sus habilidades en el 2021, el zurdo mexicano de Los Angeles Dodgers sube un poco más la vara en el 2022 y comienza a reclamar un puesto entre lo mejor de lo mejor del pitcheo de Grandes Ligas.
Comenzando la primera semana completa del último mes completo de la temporada regular de las ligas mayores, Urías encabeza la Liga Nacional en promedio de carreras limpias, un título que, hasta ahora, evadió a los lanzadores mexicanos.
"Pienso que he hecho lo mismo", dijo el pitcher de 26 años a ESPN Digital.
"Hay salidas del año pasado que me gustaron más que las de este año. Hay salidas en esta temporada en la que pude pelear pese a que mis lanzamientos no estaban tan finos como quisiera. Año con año y salida con salida, uno va aprendiendo", agregó Urías.
La temporada pasada, Urías tuvo marca de 20-3, efectividad de 2.96, ponchó 195 bateadores y solamente transfirió a 38 en 185.2 entradas. El zurdo acumuló 4.4 WAR (B-Reference) y tuvo una efectividad ajustada de 143, la segunda mejor de su carrera.
Contra todos los pronósticos, después de unirse a Fernando Valenzuela (1986), Teodoro Higuera (1986) y Esteban Loaiza (2003) en la corta lista de pitchers mexicanos con 20 triunfos en una temporada, Urías ha subido un peldaño en el 2022.
Después de limitar a los San Diego Padres a una carrera y dos hits en seis entradas en su aparición más reciente, Urías colocó su foja de la temporada en 15-7, se trepó al liderato de efectividad del viejo circuito (2.29) y bajó el porcentaje de WHIP a 0.95, en 145.0 entradas. Ahora tiene 3.8 WAR en 26 aperturas y su efectividad ajustada es de 183, una marca personal y un territorio que solo pisan grandes del montículo.
En su temporada de 20 triunfos, Loaiza fue tercero de la Liga Americana con un promedio de efectividad de 2.90, lo mejor ubicado que ha quedado un tirador mexicano en el liderato. Solamente como referencia: En su histórica campaña de Novato del Año y Cy Young, en 1981, Valenzuela terminó en séptimo lugar en efectividad, con 2.48.
"Estoy contento y agradecido con Dios por estar saludable", dijo Urías, el único pitcher de los Dodgers que no ha pasado mucho tiempo en la lista de lesionados en los últimos dos años.
"Pienso que es lo más importante para mi, estar saludable. Cuando [estamos sanos] podemos demostrar lo que tenemos. Mantenerme así en septiembre y empezar octubre de la mejor forma, es la meta", dijo Urías, quien tiene 7-1 y efectividad de 1.10 en ocho aperturas en la segunda mitad de la temporada.
Desde el 2020, cuando el manager Dave Roberts y la oficina de operaciones lo convirtieron exclusivamente en pitcher abridor (al menos en la temporada regular), Urías tiene marca de 38-10 y efectividad de 3.06 (131 carreras limpias en 385.2 innings) en 69 salidas.
"El Culichi", que fue firmado por los Dodgers a los 16 años con un bono millonario en el 2012 y devenga un salario de $8 millones en el 2022, será elegible para convertirse en agente libre por primera vez en su carrera luego de la próxima temporada y entonces estará en posición de romper otras marcas para lanzadores mexicanos.
En junio del 2011, los St. Louis Cardinals firmaron una extensión de contrato con Jaime García que garantizaba $27,5 millones por cuatro años, con dos opciones que elevaban el paquete a $50 millones. Las opciones se convirtieron en dinero garantizado posteriormente. En el 2017, el último año de ese acuerdo, García ganó $12 millones.
El zurdo Oliver Pérez acordó con los New York Mets como agente libre por tres años y $36 millones de dólares en el 2008 y ganó exactamente $12 millones en cada año del compromiso.
En el mercado actual, un abridor zurdo de 27 años con semejante historial reciente, vale muy por encima de los $100 millones de dólares.
"Me siento bien confiado en la loma. Me gusta competir. A veces grito en la loma, pero no es contra nadie, es para mí mismo. Trato de ser perfeccionista en lo que hago en una liga en la que el mínimo error te puede salir muy caro", dijo Urías.