<
>

El pedido del jefe de Williams a Franco Colapinto para Las Vegas

James Vowles habló sobre la situación difícil que vive el equipo tras los accidentes de Brasil y tuvo una charla con el argentino y con su compañero, Alex Albon.

El Gran Premio de San Pablo hizo mella en Williams. Los tres accidentes que sufrieron sus pilotos bajo la lluvia del domingo de Interlagos puso a la escudería de Grove en una complicada situación. Los dos FW46, tanto el de Franco Colapinto como el de Alex Albon, terminaron en una bolsa. El tailandés se pegó durísimo durante la clasificación y ni siquiera pudo largar la carrera (venía de no completar un giro en México tras otro accidente) y el argentino se golpeó dos veces: en la qualy (el team lo recuperó) y en la carrera.

El equipo dirigido por James Vowles debió trabajar intensamente en las tres semanas que separaron las citas de Brasil y la de Las Vegas (fecha 22 del ejercicio actual) para poder llegar con los dos autos listos para salir a girar en el urbano de Nevada, con un costo total de 2,5 millones de euros. No fue sencillo, pero consiguieron hacerlo, en ambos casos, con la última configuración disponible. Eso sí, el inconveniente pasa ahora por los pocos repuestos con los que cuentan para el fin de semana en la Ciudad del Pecado. Si hay roturas, probablemente se deban reemplazar elementos por especificaciones anteriores.

Ante esta situación, el pope de Williams tuvo una charla con sus pilotos antes de comenzar la primera tanda de ensayos en el helado asfalto de las calles de Las Vegas. Ese frío justamente saca grip y genera que se gire casi sobre hielo. Por eso, el pedido de Vowles fue de comenzar con calma e ir buscando los límites a medida que avance el fin de semana. “Lo que les pedí a ambos pilotos es que vayan de a poco”, dijo el inglés en declaraciones a Sky. “Hemos tenido unas últimas semanas muy duras, tenemos nuestra condición de repuestos en una situación en la que contamos con dos coches de carreras con la última especificación, pero tenemos que tener más cuidado y construir de a poco, especialmente en esta pista. Y ya verán que mañana (por el sábado) mejorarán bastante el ritmo", señaló.

Con respecto a la falta de grip del piso de Vegas, Vowles analizó: “Obviamente, ese un trazado urbano. Pero acá da la sensación de que el auto flota, no se siente el límite como puede pasar en Singapur o en Bakú”. La situación compleja en cuanto a los repuestos de los FW46 no aleja un ápice a Vowles de sus metas competitivas. “No vengo aquí a dar vueltas, ni tampoco los pilotos, ni este equipo. Estamos aquí para asegurarnos de que, si hay puntos sobre la mesa, iremos por ellos. En estos momentos estamos un poco atrasados, tenemos que hacer algunos cambios, pero venimos acá para seguir luchando contra nuestros adversarios, y lo que más hemos demostrado es que somos capaces de obtener estos resultados en estas circunstancias. Este fin de semana será una lucha por el campeonato. Puede pasar cualquier cosa, y tenemos que estar ahí para asegurarnos de que estamos dando el máximo que el coche puede", cerró.

En los entrenamientos se notó el pedido de Vowles. Colapinto fue 18°, a 2s043 de Lewis Hamilton, el más veloz de la primera jornada. Peor le fue a Albon, quien apenas dio tres vueltas en la segunda sesión y debió parar por un problema en el sistema de combustible. "El problema del auto de Alex está controlado. Mi preocupación es el tiempo perdido en pista, que es muy necesario en esta situación", dijo Vowles.