La reestructuración contractual le pagará más de 18 millones de dólares en cada uno de los dos siguientes años, dijeron fuentes a ESPN este lunes
OXNARD -- Veintiún días después, Zack Martin está en camino al campamento de entrenamiento de los Dallas Cowboys en Oxnard, California.
Los Cowboys y su guardia All-Pro alcanzaron un acuerdo para una reestructuración contractual que le pagará más de 18 millones de dólares en cada uno de los dos siguientes años, dijeron fuentes a Adam Schefter de ESPN este lunes. Ambos años están totalmente garantizados, de acuerdo a las fuentes.
Martin tenía programado cobrar 13.5 millones de dólares este año, y 14 millones de dólares en salario base, con un bono de plantilla para el año que viene.
Aunque el pacto está todavía sin firmar, se espera que Martin vuele pronto a California.
Martin publicó "De regreso al trabajo", este lunes en sus redes sociales.
Fuentes dicen que hubo discusiones entre los Cowboys y el agente de Martin en los últimos 20 días, y hubo charlas directas entre Martin y el propietario y gerente general del club, Jerry Jones.
Se supo unos días antes del campamento de entrenamiento que Martin estaba contemplando no reportar a tiempo porque estaba "dramáticamente subvalorado con respecto al mercado", dijo una fuente a Schefter. Desde que Martin se convirtiera en el guardia mejor pagado en el 2018 con 14 millones de dólares por año, Chris Lindstrom de los Atlanta Falcons y Quenton Nelson de los Indianapolis Colts reestablecieron el mercado con sueldos de 20.5 millones y 20 millones de dólares, respectivamente.
A inicios del campamento, Jones dijo que los Cowboys no deseaban ajustar el contrato de Martin dado que impactaría negociaciones futuras con jugadores como Micah Parsons, quien puede firmar una extensión a partir de la próxima campaña.
Jones también hizo referencia al impacto financiero que el boicot tendría sobre Martin. Si los días libres son incluídos, las multas totalizarían más de 1 millón de dólares que no pueden ser rescindidas ni perdonadas, de acuerdo al contrato colectivo de trabajo. Martin posee un desescalador salarial de 500,000 dólares al que el equipo puede renunciar.
Martin, quien cumple 33 años de edad en noviembre, ha llegado al Pro Bowl en ocho de sus nueve años y ha sido designado All-Pro en seis ocasiones, al tiempo que persigue a Larry Allen por la designación del mejor liniero ofensivo en la historia del equipo.
En ausencia de Martin, los Cowboys han optado por Josh Ball como guardia derecho. Después del partido de pretemporada del pasado sábado frente a los Jacksonville Jaguars, el head coach Mike McCarthy dijo que la profundidad de la línea ofensiva era una prioridad. Con Martin de regreso, los Cowboys tienen tiempo para preparar a sus titulares para la apertura de campaña el 10 de septiembre próximo, frente a los New York Giants.
"Siempre quieres llegar a un punto en el campamento donde tienes a tus cinco tipos que intentan mantener conectados y obtener ritmo y eso", declaró McCarthy el sábado.
El nuevo contrato hará feliz a Dak Prescott. Respondió, "Páguenle al hombre", cuando se le preguntó acerca de la ausencia de Martin al inicio del campamento. Cuando Martin llegue a Oxnard, probablemente será insertado con paciencia a la alineación, dado que ha estado trabajando por su cuenta.
Antes de que se diera a conocer la noticia del contrato, el ala defensiva DeMarcus Lawrence, elegido en la segunda ronda del Draft 2014, después de Martin, no sonó demasiado preocupado.
"Sé lo que hay, hombre. Zack estará bien. Los Cowboys estarán bien", declaró Lawrence. "Y lo veré pronto".