Jordon Rooney, amigo y representante del jugador para asuntos comerciales, indicó que la familia se siente alentada por las muestras de apoyo que ha recibido de todo el mundo para el jugador de los Bills
ORCHARD PARK -- Mientras un sedado Damar Hamlin yacía frente a él en una cama de hospital en Cincinnati rodeado de máquinas que lo proveen de oxígeno y fluidos, el safety de los Indianapolis Colts, Rodney Thomas, le dio unas palabras de aliento a su amigo.
“Sólo le dije, estoy aquí para ti, eso es todo”, indicó el miércoles, Thomas. “Sólo decir lo mismo: Te apoyamos y vas a superarlo”.
No le importó si el safety de los Buffalo Bills podía escucharlo. Lo más importante para Thomas, quien hizo el viaje de dos horas de Indianapolis a Cincinnati, fue estar con Hamlin --su excompañero en la secundaria en Pittsburgh-- y con su familia.
“Sólo me calmó e hizo el viaje a casa más fácil”, indicó Thomas. “Pude irme a casa y saber que va a estar bien. Estoy aquí para él. El mundo está aquí para él”.
Dos días después de que el corazón de Hamlin, de 24 años, se detuvo y necesitó ser resucitado en el campo durante el encuentro ante los Bengals de lunes por la noche, continúa el gran apoyo.
Después de que los aficionados sostuvieron vigilias en Cincinnati y la casa de los Bills en Orchard Park, New York, el martes, fue el momento para la comunidad de la NFL --aquellos que conocen a Hamlin y aquellos que no habían escuchado de él antes del lunes-- para expresar su apoyo después de que la mayoría de los equipos regresaron a entrenar.
Aunque continúa sedado, la recuperación de Hamlin tras sufrir un paro cardiaco continúa avanzando en “dirección positiva”, dijo el representante del jugador para asuntos comerciales, Jordan Rooney por teléfono a The Associated Press.
“Todos seguimos optimistas”, aseguró Rooney y añadió que la familia le pidió no dar más detalles.
Los Bills indicaron que Hamlin sigue en estado crítico, pero que ha tenido señales de mejora. Señalaron que esperan que siga en terapia intensiva.
Rooney indicó que la familia se siente alentada por las muestras de apoyo que ha recibido de todo el mundo para el jugador de los Bills, quien está en su segundo año dentro de la NFL, desde que lo transportaron en ambulancia al Centro Médico UC.
“Todos [los familiares] están emocionados ahora”, aseveró Rooney. “Damar sigue siendo su preocupación principal, pero todos buscan siempre la forma de convertir un problema en una situación positiva. La recuperación luego de esto, para él y para su familia, van a ser increíbles”.
La familia rápidamente está descubriendo la impresión que ha dejado Hamlin.
El entrenador en jefe de los New York Giants y excoordinador ofensivo de los Bills, Brian Daboll, portó una gorra con el número 3 de Hamlin.
El tackle defensivo de los Minnesota Vikings, Harrison Phillips, envió la cena a la familia de Hamlin y el personal médico.
“Damar tenía el casillero cerca del mío y pasamos tiempo en Buffalo y me ayudó con mi fundación porque esa es su naturaleza dadivosa”, indicó Phillips, quien pasó sus primeras cuatro campañas con Buffalo antes de firmar con Minnesota.
Mientras, los Bills siguen lidiando con el impacto de ver a su compañero colapsar en el campo tras una tacleada, su corazón sin latir.
Los Bills, quienes regresaron a Buffalo el martes por la madrugada, tenían previsto realizar reuniones del equipo y una práctica sin contacto físico, cerrada a la prensa. Reanudarían los entrenamientos intensos este jueves, de cara a su partido del domingo frente a los New England Patriots.
El vicepresidente ejecutivo de la NFL, Troy Vincent, indicó que las conversaciones con el entrenador de los Bills, Sean McDermott, se han concentrado sólo en la salud mental y en cómo está lidiando McDermott y el equipo tras lo sucedido.
“Es difícil y el entrenador sigue batallando”, admitió Vincent con la voz entrecortada.