San Francisco está 3-0 por segunda vez en los últimos 25 años
No siempre fue bonito y no fue tan fácil como podría indicar el puntaje final, pero los 49ers se encargaron del asunto.
En una semana corta, los Niners, sin el receptor lesionado Brandon Aiyuk (hombro), lograron la victoria. Si bien los Giants estuvieron escasos de personal en su segundo juego en gira por la Costa Oeste, no hay necesidad de que los 49ers se disculpen por otra victoria, ya que San Francisco está 3-0 por segunda vez en los últimos 25 años.
Pero si esta victoria enseñó algo, es que no se debe descartar el valor de Aiyuk para los Niners. Los Giants llegaron a este juego después de haber cargado más que cualquier equipo de la liga desde principios de 2022. Estuvieron a la altura de esa reputación, enviando implacablemente defensivos adicionales contra al mariscal de campo de los 49ers, Brock Purdy.
Esas cargas fueron efectivas en la primera mitad, no sólo para presionar a Purdy sino también para causar que no conectara con sus objetivos y obligar al entrenador de los Niners, Kyle Shanahan, a recurrir a más pantallas y pases rápidos en lugar de las rutas intermedias que a menudo prefiere.
Ahí es donde Aiyuk habría marcado la diferencia. Desde el comienzo de la temporada pasada, Aiyuk tiene 50 recepciones (empatado en el octavo lugar en la NFL) para 679 yardas (empatado en el noveno) contra cobertura personal. Nadie en los Niners supera de manera más consistente y rápida la cobertura que Aiyuk.
En la segunda mitad, su compañero receptor Deebo Samuel (seis recepciones para 129 yardas y un touchdown) y el ala cerrada George Kittle (siete recepciones para 90 yardas) ayudaron y tomaron el reto, y la defensa de los Niners dominó a los Giants.
Sin duda, los 49ers hicieron lo correcto al mantener fuera a Aiyuk el jueves por la noche para que pueda usar el descanso extra y recuperarse a largo plazo. Pero su ausencia también debería reforzar cuánto lo valoran por el resto de esta temporada. Y más allá.
Desglose del QB: Con los defensores constantemente en su cara, Purdy tuvo una noche un poco extraña, aunque sus números finales resultaron bastante buenos. Purdy terminó con 25 de 37 para 310 yardas con dos anotaciones para un índice de pasador de 111,3. Purdy puso el balón en peligro varias veces y tuvo suerte de evitar pérdidas de balón en la primera mitad, pero estuvo sobresaliente en tercera oportunidad. No fue su mejor actuación, pero Purdy es ahora uno de los cuatro mariscales de campo que comenzaron una carrera con al menos ocho victorias consecutivas en la temporada regular en la era del Super Bowl (desde 1966).
Purdy fue atacado en el 74% de sus retrocesos, la tasa de carga más alta enfrentada por un QB con 30 retrocesos desde Colin Kaepernick en 2013 (88% vs Cardinals). Las 29 cargas que enfrentó Purdy fueron más del doble de su máximo anterior (14). Las 236 yardas aéreas de Purdy contra la carga fueron la mayor cantidad de un pasador desde Aaron Rodgers en 2021.
Tendencia preocupante: Los Niners comenzaron la noche empatados con la quinta mayor cantidad de penalizaciones en la liga y no hicieron nada para calmar esas preocupaciones contra los Giants. San Francisco terminó con seis penalizaciones para 71 yardas, incluidas dos para 37 yardas que llevaron el primer touchdown del juego de New York.
Sobresaliente estadística: después de anotar en una carrera de cuatro yardas en la primera mitad, el corredor de los Niners, Christian McCaffrey, ahora tiene un touchdown en 12 juegos consecutivos (incluidos los playoffs), igualando a Jerry Rice con la racha más larga en la historia de la franquicia. Lenny Moore tiene el récord de más juegos consecutivos con un touchdown (incluidos los playoffs) con 17.
Siguiente partido: vs. Cardinals.