A lo largo de más de 100 años de historia, la NFL no se ha caracterizado por disputar muchos partidos en viernes, aunque en 2024 ya suma dos. Esta es la razón por la cual no lo hace.
Este viernes, los Kansas City Chiefs recibirán a los Las Vegas Raiders en la segunda edición de una nueva tradición para la NFL: el partido de Black Friday, un día después de los duelos que se juegan en el día de Acción de Gracias, o Thanksgiving. El juego entre los rivales divisionales de la AFC Oeste es, de hecho, el segundo partido en viernes en lo que va del 2024, ya que los Philadelphia Eagles y Green Bay Packers lo hicieron en la Semana 1 de la temporada en Sao Paulo, Brasil.
Este será apenas el partido número 14 en toda la historia de la NFL que se juega en viernes, a pesar de que la liga tiene años disputando encuentros en jueves, y que los partidos en sábado son una tradición en diciembre, se ha evitado en casi toda la trayectoria de la liga jugar en este particular día de la semana.
Esto no es coincidencia, ya que gracias a una ley que se pasó en 1961 en Estados Unidos, la cual fue diseñada para proteger el deporte amateur y en especial, el futbol americano a nivel high school o preparatoria, simple y sencillamente es ilegal para la NFL disputar encuentros en viernes.
Los viernes, pañuelo amarillo para la NFL
Luego de que la NFL firmara contratos con los canales de televisión en paquete, sin permitir que sus equipos negociaran de forma individual e independiente con las cadenas, el U.S. District Court (Corte de Distrito de los EEUU) determinó que la liga había violado la ley antimonopólica del país.
La NFL argumentó que sus equipos no eran entidades independientes, sino franquicias de una misma organización, y que a diferencia de ligas como la NHL y NBA, los paquetes de partidos eran necesarios ya que el calendario del futbol americano es mucho más corto que el de las otras ligas.
Esto provocó que, en 1961, se redactara el Sports Broadcasting Act (Ley de Transmisión de Deportes) que le permite a la NFL vender sus derechos de la manera que continúa haciendo seis décadas después. Eso sí, el gobierno utilizó la ley como excusa también para proteger el deporte amateur y no suprimir la popularidad tanto del futbol americano colegial como el de high school.
Dentro de la ley, se agregó una provisión que prohíbe a la NFL jugar partidos en televisión los viernes después de las 6 pm, así como el sábado, si el estadio en el que se disputará el partido está a 75 millas (120 kilómetros) de una escuela preparatoria, entre mediados de septiembre a mediados de diciembre. La distancia es una formalidad, debido a que es prácticamente imposible construir un estadio tan lejos de al menos una institución educativa de cualquier tipo.
A lo largo de las seis décadas, ha habido algunas excepciones a esta ley, gracias al Huracán Wilma en 2005, que obligó a los Chiefs y Miami Dolphins a jugar en viernes, y los partidos que fueron movidos de día gracias al COVID-19 en la temporada 2020, sobre todo.
Pero, ¿por qué tenemos ahora partidos de Black Friday pese a la ley?
Internacionalización de la NFL y era del streaming, claves del crecimiento
La NFL inició la temporada 2024 con un calendario que incluyó el partido entre los Eagles y Packers en la Arena Corinthians, el primer partido en la historia de la liga en Brasil, y un testamento al crecimiento que ha tenido en las últimas décadas. El circuito ha disputado partidos de temporada regular en países como México, Gran Bretaña, Alemania y Brasil, teniendo planes de expandir y jugar en España e Irlanda en el futuro.
El poder salir de los Estados Unidos le abre una infinidad de posibilidades a la liga de rodear la ley promulgada en 1961, ya que evidentemente la NFL puede apuntar a que no haya una escuela preparatoria de Estados Unidos a 75 millas de Sao Paulo, Brasil, por ejemplo.
En teoría, la NFL podría poner cualquier partido que quiera fuera de los límites territoriales de los Estados Unidos en viernes o sábado, sin represalias del gobierno federal por violar los términos estipulados en aquel documento. Pero, este partido entre los Chiefs y los Raiders no se juega en Sao Paulo, o Ciudad de México o Munich, sino en el mítico Estadio Arrowhead de los bicampeones.
Los avances tecnológicos del siglo XXI ahora proveen a la NFL otra salida cuando se refiere al Sports Broadcasting Act de 1961, ya que la liga ha firmado múltiples contratos con compañías que manejan, además de transmisiones en televisión, partidos exclusivos en servicios de streaming, que no estaban contemplados bajo aquella ley.
El duelo de los Eagles y Packers en Brasil de esta temporada fue transmitido en exclusiva por Peacock, servicio de streaming de la cadena estadounidense NBC, y el partido de hoy entre los Chiefs y Raiders va por Amazon Prime Video, compañía que lleva a cabo los duelos de jueves por la noche de la liga desde hace un par de temporadas.
A pesar de que, en teoría se viole la ley al disputarse un partido en viernes a menos de 75 millas de una escuela preparatoria, el partido no va por televisión como está delineada en la ley – sino que va por streaming, un servicio que requiere de internet para poderse presenciar.
Aunque no se dará en viernes, la liga sí tendrá un partido en Navidad este año, increpando de cierta forma el calendario que se había cedido a la NBA desde hace ya varias décadas, cuando se enfrenten los Chiefs contra los Pittsburgh Steelers y los Baltimore Ravens contra los Houston Texans. Esos partidos se jugarán en miércoles.
Dentro de ciertos grupos legislativos de Estados Unidos, se ha pedido que la ley ahora se modifique para nuevamente obligar a la NFL a cumplir con no jugar los viernes, e incluir tanto los partidos internacionales como contemplar el streaming. De momento, eso no ha sucedido, ya que aún no ha causado suficiente disrupción al futbol americano de high school, una versión amateur del deporte que ha crecido de forma masiva en las últimas décadas, gracias en parte a la ley promulgada en 1961.