Kevin Dotson se ríe de la descripción utilizada para describirlo durante el proceso de draft de la NFL de 2020. Sobre todo, porque es verdad.
Un analista del draft dijo que Dotson, un guardia ofensivo de la Universidad de Louisiana, mueve a los chicos por el campo "como un portero de bar enojado". El autor probablemente no sabía lo bien que estaba en esa evaluación.
"Es una locura porque fui portero en un bar durante los últimos dos años", dijo Dotson después de que los Pittsburgh Steelers lo seleccionaron en la cuarta ronda del draft de la NFL. "Es preciso, pero soy bastante técnico en el uso de mis manos. Así que siento que la gente trata de ponerte en una caja sólo porque eres fuerte. Tan pronto como se enteran de que eres fuerte, dicen que eres un alborotador. Simplemente como que descuentan todo lo demás".
Al igual que su estilo de juego, el enfoque de Dotson como portero de un bar en el centro de Lafayette, Louisiana, fue algo más que físico.
"La gente se pone muy revoltosa cuando se emborracha", dijo Dotson. "La persona que normalmente no lo haría, por lo general se vuelve valiente, y tienes que poner un alto a eso. Trato de darles el beneficio de la duda, como, 'Oye hermano, tienes que relajarte'. Les diré eso la primera vez, que necesitan relajarse o ser expulsados. Tratando de darles una oportunidad”.
La mayoría de las veces, una cara mala de los 6 pies con 4 pulgadas y 310 libras de Dotson era suficiente.
"No quiero tener que echarte", les decía Dotson. "O puedes venir aquí, o voy a tener que sacarte”.
Dotson podría tener una reputación de revoltoso en el campo, pero fuera de él, su padre Kelcy se preocupa de que accidentalmente pueda dirigirse a sus nuevos compañeros de equipo de los Steelers --sus iguales-- como "sí, señor" y "no, señor". Así es como Kevin y su hermano gemelo, Kenny, fueron criados.
Esa combinación de fuerza y carácter es exactamente lo que hizo que los Steelers eligieran a Kevin con su segunda selección en la cuarta ronda, y lo que lo hace un candidato viable para ocupar el puesto de Ramon Foster como guardia titular izquierdo.
"Es realmente de la vieja escuela, un jugador de fútbol americano duro", dijo Rob Sale, el entrenador de línea ofensiva de la Universidad de Louisiana. "Todo vuelve a la forma en que fue criado por su padre".
Kevin no fue uno de los 337 jugadores invitados al Combinado de la NFL.
Tampoco estaba entre los 114 del Senior Bowl.
"Ese es uno de los mayores desaires de los que he sido parte", dijo D.J. Looney, el asistente de entrenador de línea ofensiva de Louisiana. "Este tipo era un All-American por consenso, comenzó más de 50 juegos. No hay ninguna mancha en su expediente. Creo que fue mie---."
No le importó a los Steelers. Después de quedar impresionado con Kevin en el juego East-West Shrine, usaron la selección N° 135 global en él, lo que lo convirtió en el primer jugador seleccionado en el draft de 2020 que no obtuvo una invitación al Combinado, una hazaña especialmente notable ya que la pandemia del coronavirus frenó el proceso de evaluación.
Ese desaire del Combinado no molesta a Kevin. Su mantra le impide concentrarse en cosas que volverían locos a otros tipos.
"Si puedo hacer algo al respecto, ¿por qué preocuparse?", Kevin dijo, repitiendo su frase favorita. "Y si no puedo hacer nada al respecto, entonces ¿por qué preocuparse? Siento que, si puedo hacer algo al respecto para cambiar el resultado de la misma, entonces no hay necesidad de que me enfade o frustre porque puedo hacer algo al respecto. Si no puedo hacer nada al respecto, entonces no hay nada que pueda hacer para cambiarlo, entonces no puedo hacer nada al respecto. Entonces no tiene sentido preocuparse por eso tampoco".
Con su propio pro day cancelado, Kevin pidió la ayuda de Looney y realizó por un pro day virtual donde corrió las 40 yardas en 4.8 segundos, y envió su cinta a los equipos. Y sin acceso a una sala de pesas, Kevin tuvo que ser creativo con su entrenamiento de fuerza. Así que se agarró de la parte trasera de su camioneta --una alquilada en ese momento-- y la jaló hacia atrás, moviéndola por la calle mientras que cañas de pescar se asomaban de la parte trasera. Un video de la hazaña acumuló casi 180,000 visitas en Twitter antes del draft.
"Ese era yo no teniendo pesas en ese momento", dijo Kevin. "Sólo era una forma de tratar de mover un poco de peso pesado".
Así es como trabaja Kevin: siempre encuentra la manera. Aprendió eso de su padre, un fan de los Steelers desde hace mucho tiempo.
Kelcy jugó como linebacker en Louisiana (entonces Louisiana-Lafayette), pero jugar en la NFL no estaba en las cartas.
En lugar de jugar fútbol profesional, Kelcy crió a sus hijos gemelos, que nacieron durante su último año. Para cuando tenían 3 años, los gemelos eran su única responsabilidad. Kelcy y su madre se habían separado. Se le otorgó la custodia completa y se hizo cargo de todas las tareas de crianza. Comenzó a inculcar una fuerte ética de trabajo en los chicos desde que tenían 7 u 8 años.
Una vez, la práctica de fútbol americano de ligas pequeñas fue cancelada, pero Kelcy, el entrenador del equipo, se fue a casa y llevó a cabo la práctica para Kevin y Kenny en su patio trasero.
"Probablemente fue uno de los tres entrenamientos más difíciles que he hecho en mi vida", dijo Kevin. "Y eso fue a los 8. Yo estaba como, 'Dios mío, esto es ridículo'. Teniendo a mi padre, sabía que daría el 100 por ciento por él".
Kelcy también aseguró que sus hijos priorizan la educación sobre todo.
El par tomó clases en Plaquemine (Louisiana) High School. Allí, tenían acceso a una variedad de actividades extracurriculares no disponibles para la mayoría de los estudiantes de preparatoria. Kevin y Kenny optaron por participar en el programa de teatro de la escuela, en su mayoría encargándose de las luces para los espectáculos. De hecho, una vez estuvieron en el ballet de la escuela.
"Fuimos el músculo para el espectáculo", dijo Kenny. "Tuvimos que pasear a las chicas por encima de nuestra cabeza. Tirarlas y recogerlas, bajarlas, recogerlas, tirarlas.
"Ellas prácticamente nos ofrecieron como voluntarios, y les seguimos la corriente”.
Durante el segundo año de Kevin, Kelcy, un director asistente de la escuela preparatoria, recibió una llamada telefónica de que Kevin había copiado parte de la tarea de su gemelo y lo había entregado como propio. Plaquemine tenía un partido de fútbol americano de distrito esa noche, y la familia había conducido desde Mississippi sólo para ver a los gemelos.
Eso no le importó a Kelcy.
Cuando Kevin salió al campo esa tarde, Kelcy lo envió de vuelta al vestuario con su computadora portátil y lo obligó a hacer esa tarea durante el partido de fútbol americano.
"Fue duro para él, pero también fue difícil para mí", dijo Kelcy. "Nunca quieres ver a tus hijos heridos. Estaba herido. Pero tenía que suceder para darse cuenta de lo que era primero. Ese era todo mi punto, que él entienda eso”.
Cuando los cinco años de Kevin en Louisiana terminaron, había iniciado 52 de 53 juegos posibles y era un All-American de primer equipo para The Associated Press.
"Mi primer año de redshirt, en mi primer partido, fue tan difícil tener que sentarme en la banca", dijo Kevin. "Es una cosa que se inculcó en mí de no estar en la banca nunca más. Esa es la razón principal por la que inicie por el resto de mi carrera. Sólo sabía que no iba a perder ese puesto de nuevo”.
Una lesión muscular abdominal lo obligó a perderse un par de juagadas contra Tulane en el Cure Bowl del 2018, pero Kevin no estuvo en la banca por mucho tiempo.
"Dije que más le valía que volviera al campo porque sabía que si no estaba lesionado, tenía que volver a meter el trasero en el juego", dijo Kelcy. "Así es como vivimos por aquí".
Aunque Kevin jugó todos los partidos de su carrera colegial como guardia derecho, Sale está seguro de que puede hacer la transición al otro lado de la línea sin problemas. Durante la preparación del tazón el año pasado, Sale redujo las jugadas de Kevin para mantenerlo sano y lo trabajó como guardia izquierdo en todos los ejercicios individuales.
"Cuando tienes tantas jugadas en una posición del lado derecho y eres diestro, te preguntas, ¿va a ser incómodo del otro lado?", Sale dijo. "Pero, cuando fue allí, fue como montar una bicicleta. No tenía ningún problema, lo cual era bueno ver. Hizo todos los ejercicios durante dos semanas y media".
Durante los cinco años de Kevin en Lafayette, su mitad inferior alcanzó a su mitad superior, y para su temporada senior, acopló su gran marco con una buena cantidad de velocidad. Los Steelers comenzaron a mirarlo durante su temporada junior, y continuaron impresionados por su desarrollo como senior. Con el puesto de guardia izquierdo abierto gracias al retiro de Foster, sacudiendo la línea ofensiva de los Steelers, Kevin estará en la competencia con linieros más jóvenes como Zach Banner y Chukwuma Okorafor, y la adquisición de agencia libre Stefen Wisniewski, para el 2020.
"Mueve a las personas", dijo el entrenador de línea ofensiva de los Steelers, Shaun Sarrett. "Cuando miras a este tipo, corre a través de la gente. Y puede sacarlos del punto de ataque. Cuando ves eso en video universitario, te llama la atención".
A pesar de jugar contra oponentes más pequeños en la conferencia Sun Belt, el desarrollo, la fuerza y el fuego competitivo de Kevin hacen que aquellos que lo conocen mejor crean que puede competir desde el primer día por el puesto titular.
"Es un tipo duro como la vieja escuela Steeler", dijo Sale. "Yo era un estudiante de primer año cuando Alan Faneca acababa de salir de LSU y fue reclutado por Pittsburgh. Eso es lo que sé de un Steeler de Pittsburgh. Es un corte de Louisiana, tipo duro. Eso es Kevin. Están obteniendo a un rudo. Va a jugar durante mucho tiempo".