Son el único invicto en la NFL, cuentan con una dominante defensiva, su quarterback y futuro miembro del Salón de la Fama no juega al más alto nivel, tienen uno de los calendarios más fáciles en la liga y los Pittsburgh Steelers de 2020 no son el blanco de las críticas que, en circunstancias similares, recibieron los New England Patriots en 2019.
Esto sólo prueba cómo la pasión u odio (deportivo, claro) dominan a la razón y nublan el juicio cuando de “analizar” se trata... o cuando se intenta analizar.
No se minimiza lo hecho por Pittsburgh hasta la mitad de la actual temporada. Si bien han mantenido su invicto por errores puntuales de varios rivales, los Steelers son únicos responsables de ponerse en posición para llevarse el triunfo en esos duelos y así cumplir con la elemental tarea de cualquier equipo contendiente: ganar los juegos que supuestamente deben ganar.
Sin embargo, es una realidad que, pese a tener varios aspectos similares al de los Patriots en 2019, el inicio perfecto de Pittsburgh no parece despertar inquietudes y la razón es sencilla, no es un invicto en el que Tom Brady o Bill Belichick estén involucrados.
Mike Tomlin y Ben Roethlisberger han sido exitosos con los Steelers, pero no al nivel como el binomio coach/quarterback de Belichick y Brady, quienes al ser el rostro de la última gran dinastía que ha visto la NFL son lógicos blancos de críticas, merecidas e inmerecidas.
Es natural, el equipo más ganador es el más odiado no importa la época. Le sucedió a los Steelers de los años 70, a los Dallas Cowboys de los 90s, a los New York Yankees casi de forma permanente, igual con Los Angeles Lakers y debía pasarle a los Patriots de este siglo.
Sin embargo, al momento de analizar en los tiempos modernos, la objetividad se pierde fácilmente y no se mide a otros con la vara que se usó para criticar a otros.
En 2009, como si los Patriots lo hubieran provocado, no fueron pocos quienes minimizaron su invicto porque su calendario era el más fácil de la NFL en relación a las marcas de sus rivales y por ende, enfrentaron a equipos con débiles ofensivas ante las que construyeron una defensiva que, de acuerdo al Power Index de ESPN, era la más eficiente y terminó como la que menos puntos permitió, la segunda mejor contra el pase y la sexta contra la carrera.
En la actual campaña, el calendario de los Steelers es el 29 en relación a la marca de sus rivales y Pittsburgh tiene a la segunda defensiva más eficiente (sexta mejor global, quinta contra el pase, novena contra la carrera y quinta en puntos permitidos).
Roethlisberger no tiene el mejor año al frente de la ofensiva de los Steelers y aún así, son pocos los señalamientos a su desempeño en comparación a los que recibió Brady en su último año con los Patriots.
Las similitudes allí están. Las diferencias, incluso, favorecerían a los Patriots.
El margen de victoria de New England en 2019 fue de 23.6 puntos en su inicio de 8-0, en el que enfrentaron sólo a un equipo con marca ganadora. En su descargo, en 2020, los Steelers han vencido a tres rivales con récord positivo.
El margen de victoria de Pittsburgh en la actual campaña es de 9.3 y sólo suman dos victorias por 10 o más puntos (10 en la Semana 1 ante New York Giants y 31 ante Cleveland Browns en la Semana 6), mientras que los Patriots sólo tuvieron una victoria por menos de 10 puntos en su inicio de 8-0 el año pasado.
En el panorama general, los Steelers deberían ser criticados por sostener su invicto con pinzas y arrancar la temporada ante rivales inferiores a los que vencieron con algunas complicaciones, pero eso no sucederá, porque su coach no se apellida Belichick y su quarterback no se apellida Brady.
Si algo evidenció la victoria de Pittsburgh sobre los Cowboys es la irregularidad de su ofensiva, que pese a sumar 309 yardas por aire en el encuentro, sólo sumó dos por esa vía y corrió en cinco ocasiones para 17 yardas en el primer cuarto.
Los Steelers son un equipo que, aunque marcha perfecto, está lejos de serlo, pero como buenos contendientes que son y han sido prácticamente por más de cuatro décadas, encuentran la forma de ganar, como lo hicieron los Patriots hace un año.
ESPN Stats & Information contribuyó a este texto.