KANSAS CITY -- Sí. Los Cincinnati Bengals van al Super Bowl.
Muy pocos, si los hubo, hubieran creído que el campeón de la AFC serían unos Bengals que llegaron a la antesala del Super Bowl como los no favoritos y nunca se rindieron pese a estar abajo por 18 puntos y remontaron y vencieron en tiempo extra a los Kansas City Chiefs con marcador de 27-24 en el Juego de Campeonato de la conferencia.
“Si este triunfo contra este equipo, el segundo mejor en la Conferencia Americana, no prueba que pertenecemos a este nivel, no sé que lo probará”, dijo Joe Burrow, quarterback de los Bengals y quien está en el Super Bowl en apenas su segundo año en la NFL.
A su vez, los Bengals están en el juego por el título de la NFL por tercera ocasión en su historia y después de sólo ganar cuatro partidos en 2020.
Los Chiefs tuvieron todas las oportunidades necesarias para sentenciar el triunfo desde la primera mitad, luego de estar arriba 21-3 en la pizarra, sin embargo, se cuestionará la que, para muchos, fue una actitud de arrogancia al decidir ir por el touchdown en los segundos finales del segundo cuarto en vez de ir por un gol de campo.
Al final, Kansas City se fue al descanso sin puntos en su última serie de la primera mitad al agotar el tiempo en el reloj y sin la posibilidad de pedir un tiempo fuera, luego de cometer el error de solicitar el primero en el primer cuarto, antes de pedir la revisión de una jugada de primero y 10.
Aunque la revisión les fue favorable, los árbitros le descontaron el tiempo fuera a los Chiefs por solicitarlo antes de que el coach Andy Reid lanzara el pañuelo rojo para revisar la acción.
Los “hubiera” no existen, pero en la NFL hay que acabar con el oponente cuando se tiene la oportunidad de hacerlo o no hacerlo puede tener consecuencias, como le sucedió a los Chiefs.
“Es muy probable que mandé la jugada equivocada. Ya nada se puede hacer“, señaló Reid sobre la última acción de la primera mitad.
La segunda mitad fue una historia diferente, casi idéntica a la que se vivió entre ambos equipos en la Semana 17 de la temporada regular, cuando Cincinnati venció 34-31 a Kansas City, luego de que los Chiefs dominaron a placer la primera mitad, incluso, con dos ventajas de 14 puntos.
El día del Juego de Campeonato de la AFC no fue el día de Patrick Mahomes, quien tuvo un desempeño muy distinto al que tuvo en la Ronda Divisional ante los Buffalo Bills, cuando se cargó al equipo en hombros para conseguir una de las victorias más espectaculares de la historia de la NFL.
Después de una primera mitad casi perfecta ante los Bengals, Mahomes y el resto de la ofensiva de Kansas City colapsó. Tras sumar 292 yardas totales en los primeros 30 minutos, el ataque de los Chiefs sólo agregó 77 en la segunda mitad.
Mahomes sólo falló dos pases y lanzó tres para anotación antes del descanso, pero en la segunda mitad y el tiempo extra, erró 11, incluidos dos que fueron interceptados y la segunda, en tiempo suplementario, prácticamente sentenció el partido a favor de Cincinnati al tener que recorrer poco terreno para preparar el gol de campo del novato Evan McPherson, quien estuvo perfecto en cuatro intentos en el Arrowhead Stadium.
A la ofensiva, los Bengals sumaron sólo 152 yardas totales en la primera mitad y terminaron con 359. Burrow, nombrado el Jugador Más Valioso del Juego de Campeonato de la AFC, distó de ser perfecto y sus números fueron discretos (23-39, 250 yardas, dos touchdowns, una intercepción), pero hizo las jugadas necesarias en la segunda mitad.
La estadística más importante es que Burrow sólo fue capturado una vez, a diferencia de las nueve que sufrió en la Ronda Divisional ante los Tennessee Titans, o de las cuatro que los Bengals sumaron ante Mahomes.
Los Chiefs lograron contener al receptor Jamar Chase, quien en la temporada regular les completó 11 pases para 266 yardas, pero surgió la figura de Tee Higgins, quien acumuló 103 yardas en seis recepciones, cuatro de ellas para primero y 10.
A su vez, la defensiva de Cincinnati permitió 78 yardas de Tyreek Hill en la primera mitad y el receptor no sumó ni una en la segunda.
Así, los Bengals le enseñaron a ajustar al “rey de los ajustes” y no fue casualidad, porque lo hicieron en los dos partidos en los que vencieron a los Chiefs en esta campaña y su recompensa fue el boleto al Super Bowl LVI.
“Hemos sido un equipo de la segunda mitad todo el año. Nuestra defensiva mejoró en la segunda mitad y nosotros pudimos ejecutar mejor”, sentenció Burrow.