El 2021 dejó saldos positivos y negativos para los clubes grandes de la Argentina. Con balances positivos, al menos desde los resultados, terminaron Boca Juniors y River Plate. Con más dudas que certezas quedaron Racing Club, Independiente y San Lorenzo.
BOCA JUNIORS
Terminó el año como lo empezó: ganando un título. En enero conquistó la Copa Diego Armando Maradona y en diciembre se quedó con la Copa Argentina y el pasaje asegurado a la CONMEBOL Libertadores 2022.
En el medio, claro está, pasaron cosas. Y no todas fueron favorables. El equipo se quedó afuera de la Libertadores en octavos de final por penales, ante Atlético Mineiro. Fue una eliminación injusta, con fallos del VAR que claramente perjudicaron al Xeneize.
Luego vino el despido de Miguel Angel Russo y la llegada de Sebastián Battaglia, quien estaba a cargo de la Reserva. Lo cierto es que pese al cambio de DT y una mejoría en el rendimiento futbolístico al comienzo del ciclo de Battaglia, Boca deja muchas dudas en cuanto a su rendimiento.
A esto hay que sumarle problemas internos dentro del plantel generados, por caso, por la falta de compromiso de dos jugadores considerados importantes dentro del plantel como Edwin Cardona y Sebastián Villa.
Más allá de los títulos, es para destacar el surgimiento de juveniles como Varela, Medina y Zeballos, entre otros.
RIVER PLATE
Arrancó de menor a mayor. Más allá de la goleada ante Racing en marzo por 5 a 0, en la final de la Supercopa Argentina, el equipo quedó eliminado por Boca en la Copa de la Liga y en la Copa Argentina.
Además de las derrotas ante el clásico rival, otro golpe fuerte fue el sufrido ante el Mineiro por la Libertadores, donde fue eliminado de manera contundente tras perder por 1 a 0 de local y 3 a 0 de visitante en cuartos de final.
Luego, el equipo se enfocó en el campeonato local y comenzó a mostrar su mejor versión, ganando el Torneo de la Liga a cuatro fechas del final con un Julián Alvarez en todo su esplendor. Y como cierre, obtuvo ante Colón el Trofeo de Campeones al golearlo 4 a 0.
La noticia más importante del año de todos modos, es la continuidad de Marcelo Gallardo al frente del plantel.
INDEPENDIENTE
Arrancó el año con cambio de DT: tras la desprolija salida de Lucas Pusineri, en su lugar llegó Julio César Falcioni. El balance del año del Emperador termina siendo positivo, aunque está claro que al Rojo no le sobró nada.
El Rey de Copas se clasificó a una copa internacional (la CONMEBOL Sudamericana) cuando la meta era ir por la Libertadores, pero la falta de regularidad le hizo perder puntos importantes que fueron decisivos.
En el medio, los problemas dirigenciales, la falta de presupuesto y un plantel que perdió jerarquía no ayudaron al DT.
El final del año lo encuentra con el escándalo de las elecciones suspendidas y con Eduardo Domínguez como posible sustituto de Falcioni en el banco.
RACING CLUB
Termina un año duro. Con Juan Antonio Pizzi en el banco perdió dos finales. Una, la Supercopa Argentina a partido único, donde River lo vapuleó con un 5 a 0 contundente; la otra, tras caer con Colón por 3 a 0 en la Copa de la Liga.
Tras el interinato de Claudio Ubeda llegó Fernando Gago, en una apuesta pensando en el 2022, donde ya no tendrá a Lisandro López, ídolo y gran referente, quien anunció su despedida del club. Al menos de la mano de Pintita (perdió cinco partidos y ganó tres partidos), logró entrar con lo justo a la CONMEBOL Sudamericana.
SAN LORENZO
De todos los grandes, es el que peor la pasó en este 2021 que termina. Quedó en el puesto 21 sobre 26 equipos en la Liga Profesional, y por momentos peleó por escapar del último lugar de la tabla.
El año comenzó con Diego Dabove en el banco de suplentes, ciclo que terminó en mayo. Luego llegó el uruguayo Paolo Montero, quien también terminó renunciando por la mala campaña del equipo.
El Ciclón nunca pudo encontrar un rumbo futbolístico, los resultados no ayudaron y la dirigencia fue la frutilla del postre dentro de un año para el olvido.
A horas del cierre del 2021, el Ciclón confirmó a Pedro Troglio como nuevo entrenador, con la esperanza de mejorar la pobre imagen de los últimos tiempos.