Durante décadas, Brasil estuvo a la sombra de Argentina y Uruguay en la Copa América. Sin embargo, desde los noventa ha recuperado terreno y en la edición 2024 buscará su décimo título.
En 1997, la Canarinha tenía solo cuatro coronas continentales contra 14 de ambos rioplatenses. Hoy, el paisaje es diferente, mucho más cercano a la realidad, que ha mostrado a los tres gigantes muy parejos desde hace un siglo.
Brasil fue uno de los cuatro fundadores del torneo más antiguo del mundo, junto a Argentina, Uruguay y Chile. En 1916 finalizó en el tercer puesto en Buenos Aires, con dos empates y una derrota, ante la Celeste el campeón. Al año siguiente repitió la actuación y en en la tercera edició logró su primera estrella, en casa.
El Sudamericano 1919 se jugó en el estadio das Laranjeiras de Rio de Janeiro. El local se consagró campeón tras vencer a Uruguay en un desempate. El partido finalizó 0-0 y se disputaron dos suplementarios de treinta minutos, los más largos de la historia. El legandario Arthur Friedenreich marcó el gol de la victoria.
Repitió el título en 1922, también como anfitrión y en los 75 años siguientes solo logró dos campeonatos: 1949 y 1989, ambos en Brasil, por supuesto. En el primero celebró el equipo que luego sufriría el Maracanazo, con Ademir como figura; y en el segundo las figuras fueron Bebeto y Romario.
Su era dorada comenzó en 1997, cuando se consagró por primera vez como visitante. Con Ronaldo como estrella y Djalminha, Romario y Leonardo como acompañantes venció a Bolivia en final de La Paz. Dos años después repitió en Paraguay, de la mano de Ronaldo una vez más y de Rivaldo.
Los títulos de 2004 y 2007, en Perú y Venezuela, son recordados por haberle ganado en ambos a Argentina en la gran final. Y el de 2019 sirvió para celebrar en casa y olvidar al menos por un rato la Copa del Mundo 2014. En 2021 perdió la final frente a Argentina en el Maracaná,