La campaña de cuartos de final del Deportivo Pereira refrendó el prestigio del fútbol colombiano en los torneos continentales. A puro corazón llegó lejos en su debut por Conmebol Libertadores.
El empate 0-0 contra Palmeiras en Brasil cerró una participación digna del equipo matecaña en la Copa. Un centenar de aficionados lo siguió hasta Sao Paulo para aplaudir su rendimiento.
El grupo F no lo intimidó. Clasificó segundo en un grupo con campeones. A Boca Juniors le ganó, a Colo Colo lo eliminó en Santiago. Pasar a octavos era suficiente en su debut, por su nómina corta, el recambio de 16 jugadores y su falta de inexperiencia internacional.
Punto a punto, el Pereira construyó una temporada de colección. Asustó a La Bombonera, se hizo fuerte de local. Conquistó la simpatía por su humildad. Gustó por su solidaridad en el juego. También sacó a Independiente Del Valle y cruzó una frontera inaccesible desde 2016.
En los cuartos de final enfrentó a Palmeiras. La responsabilidad lo desbordó. A los 35' perdía 0-3 ante sus hinchas. Los errores son más caros frente a los candidatos. Aún así, mantuvo el aprecio de todos.
Su técnico Alejandro Restrepo gestionó la austeridad con criterio. Fortaleció la autoestima del plantel. Demostró que su futuro es enorme. Llegó más lejos que Nacional, Millonarios, Medellin y Deportes Tolima.
Creyó en la línea de tres, con dos laterales muy profundos para complementar un mediocampo poblado y dos delanteros. Los referentes respondieron. El capitán Jhonny Vásquez, el defensor Carlos Ramírez y el volante Juan Pablo Zuluaga lideraron sin complejos en canchas difíciles.
Este equipo se animó a elevar la voz en un torneo dominado por brasileños y argentinos. Recuperó nuestro prestigio. Dejó una exigencia alta para lo que viene. Demostró que es posible competir.
“Para un club como el nuestro, que hace cuatro años estaba en segunda división, que está construyendo una historia bonita, que ha sabido competir y ser campeón en su país, es un balance positivo. Ojalá que podamos seguir compitiendo de esta manera en Colombia para volver a disputar la Libertadores”, resumió Restrepo.
Pereira hizo feliz al fútbol colombiano.