La victoria parcial de Barcelona ante Orense por LigaPro, por 2-0 en el primer tiempo, dejó un buen sabor en el equipo y en su cuerpo técnico. Sin embargo, no todo pudo ser completo, pues sobre el final de la primera parte Octavio Rivero salió lesionado y generó preocupación por la acción.
En un centro rasante de Gustavo Vallecilla, Rivero y Janner Corozo llegaban por el segundo palo. El segundo pudo conectar el balón, pero sin dirección de gol, mientras que en la velocidad de la jugada Steeven Quiñónez cayó encima del cuello de Rivero.
El delantero se quedó tendido y sin moverse en el campo de juego, mientras recibió atención médica. Salió en camilla y aunque después lo hizo por su propio pie, lucía muy adolorido. En su lugar entró Miguel Parrales.
Hay que recordar que Rivero se recuperó de una lesión de rodilla que le impidió estar en seis partidos. Después reapareció tres fechas atrás, para los partidos contra Delfín y Liga de Quito.
