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El Barça de Koeman, el Barça del odio

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Barcelona evitó la derrota gracias al gol agónico de Araújo (3:00)

Ronald Araújo evitó la derrota del Barcelona con agónico gol para el 1-1 ante Granada. Los de Ronald Koeman estuvieron abajo en el marcador desde el minuto 2 del encuentro. (3:00)

Ronald Koeman puede gustar más, menos o nada. Pero Ronald Koeman, referente futbolístico de un Barcelona con sabor a leyenda que se llamó Dream Team, sufre en primera persona un acoso mediático que va más allá de la simple discusión futbolística. A Koeman se le afea todo y no se le concede nada y parece que sea responsabilidad suya jugar con una plantilla cogida con alfileres y a la que le faltan jugadores determinantes. Ni hace falta hablar de Messi. Para nada.

"El Barça de hoy en día no es el Barça de hace ocho años". Tan claro como directo. Simple pero contundente. "Jugamos a la manera del Barça, con el 4-3-3, pero no tenemos velocidad en banda porque Coutinho no es tan rápido y se va para adentro, como Demir" quiso argumentar, aludiendo a la ausencia de "Ansu y Dembélé" para acabar de manera rota: "Perdón si no me entendéis... La culpa será mía".

Koeman ofreció este lunes una imagen derrotada en la sala de prensa. Por primera vez pareció ser consciente, casi sin disimulo, de que sus días están contados en el banquillo de un Barça que se cae a pedazos y en el que personaliza el eslabón más débil. Quien le fichó en 2020 y quien le mantuvo en 2021 debieran saber que siendo uno de los hijos de Johan Cruyff, un alumno de primer orden, su credo futbolístico está alejado de aquel atrevimiento suicida de su mentor y que solamente fue capaz de imitar y hasta mejorar, sí, Pep Guardiola.

"Parece que tenga que dar argumentos para todo... Si ves la lista de convocados... ¿Qué se puede hacer? ¿Jugar al tiqui taki? No tienes jugadores con velocidad en el uno contra uno y por eso cambiamos de sistema" repitió, impaciente y disgustado un técnico atado a la necesidad que rodea a este Barça de mínimos y en el que personaliza el saco que recibe todos los golpes.

En las redes sociales se brama que éste es el peor Barça DE LA HISTORIA y que Koeman es el PEOR ENTRENADOR que jamás se sentó en el banquillo del Camp Nou como si tal cosa. Con una memoria más inexistente que limitada, el héroe de Wembley se convierte para muchos en un apestado al que nadie en el club es capaz de defender en voz alta y al que dejan que se vaya consumiendo sin solución.

Y después de Koeman... ¿Qué? Asusta pensar hacia donde puede ir este Barça cuando se decida defenestrar al holandés porque a la vista está que el problema va mucho más allá del banquillo. Y eso es algo que debieron, y aún deberían, poner en el escenario todos aquellos que van dejando morir a un entrenador que para nada merece el odio que recibe de un barcelonismo sin memoria.