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Los cuatro grandes, entre estado de gracia y desgracias

A los considerados grandes del futbol mexicano, como a otros equipos, se les fueron siete fechas ya. Pero, refiriéndonos a los primeros, quiénes de ellos están en estado de gracia y quiénes tienen desgracias; tomemos estado de gracia desde la acepción: "situación favorable que facilita el éxito".

Empecemos por América, aunque está en la parte alta de la tabla a solo tres puntos de Cruz Azul, las sensaciones no terminan por ser las mejores, porque cuando gana no termina por convencer, a excepción de aquella victoria de 3-1 sobre Santos, sobre todo, en el primer tiempo. Porque ha recibido gol en seis de los siete partidos, tan es así que Miguel Herrera busca soluciones trayendo de regreso a Luis Fuentes, cambiando de linea de cuatro a línea de cinco, aunado a la lesión de Bruno Valdez; porque le han expulsado jugadores en tres de los siete juegos, porque las lesiones siguen estando presente, ya apuntaba lo de Bruno Valdez, quien queda fuera el resto del torneo, porque seguimos esperando que los lesionados regresen, pero regresen para potenciar el equipo y no sólo para hacer acto de presencia. Otra vez tengo que decir que es tiempo de que aparezcan ya Gio, Benedetti, Ibargüen, Leo Suárez; de que se ponga al cien a Sergio Díaz, de ver al Roger que jugó contra Tijuana y Santos y no al de Monterrey. América dentro de todas sus desgracias, busca la manera de estar en los primeros lugares y ahí encuentra su estado de gracia.

Chivas, aquí todo apunta a las desgracias, resulta difícil poder encontrar un estado de gracia, por lo menos, hasta el momento. De entrada cambió de director técnico, se fue Luis Fernando Tena y llegó Vucetich. Pero las mayores desgracias pasan por el aspecto disciplinario, Guadalajara se ha visto envuelto desde hace un tiempo por las indisciplinas de varios de sus jugadores y, cuando parecía que con Ricardo Peláez todo esto cambiaría, resulta que no ha sido tan así. Desde Calderón, pasando por Javier López y las reincidencias de Antuna y Vega. Estos últimos, "perdonados" por su directiva en sus hechos más recientes. Lo que parecía una buena mediana medida se convirtió en una medida de broma, de risa, después de que los capitanes Molina y Mier intercedieron por los "castigados" al hablar con la directiva y levantarles la "suspensión indefinida" que duro tan solo tres días, aunque dejaron la multa. La directiva tuvo que haber sido mas firme y mantener la suspensión pero con el so pretexto de no afectarse en lo deportivo pues ¨necesitan" de estos jugadores, cedieron. Sentando un precedente que le puede costar caro, pues si alguno más lo hace, sabe cuál será su tipo de "castigo" y si este es distinto pegará el grito en el cielo como si le asistiera la razón.

Otra de las desgracias de Chivas, es la falta de gol, la cual no es nueva y la que establecí desde antes del inicio del torneo. No ha marcado gol en cinco de sus siete partidos, a José Juan Macías se le ha mojado la pólvora, solo un gol en los siete partidos que ha jugado como titular, en la fecha 4 ante Juárez. Nada que ver con el Macías de León, que marcó 19 goles en un año, 16 en temporada regular y tres en liguilla. Pero el asunto no pasa solo por el gol, también por la generación de juego, por el volumen de juego que Chivas no es capaz de producir, porque no es suficiente con tratar de abrir la cancha ya sea con Brizuela, Angulo, Antuna y hasta Calderón, sino quién arrastra el balón hasta tres cuartos de cancha y desde ahí distribuir el juego ya sea para abrirlo o para tener futbol interno, ahí ni Javier, ni Villalpando cuando han entrado han marcado diferencia. Además de Beltrán, lo mejorcito que podemos rescatar es la zona defensiva, comportándose como una de las menos goleadas.

Las ausencias por lesión, indisciplina y contagios, que en temas de COVID-19 ha sido uno de los equipos mas afectados son parte de las desgracias de Chivas en siete fechas del torneo. A Guadalajara le urge encontrar su estado de gracia, hoy tiene ocho puntos, abajo de la mitad de la tabla y podría caer mas posiciones, aunque sabemos que en nuestro torneo una victoria te puede catapultar de manera significativa. El panorama luce gris aún de la mano del Vuce.

Uno de los que sí está en estado de gracia es Pumas. Invicto tras siete jornadas, quizá con algunos partidos que fue menos que el rival pero supo sortear los malos momentos. Hay quienes dudan del paso universitario por la calidad de los equipos que ha enfrentado, pero ese no es problema de Pumas, ellos han hecho lo que tenían que hacer sumar y sumar, pues sino lo hubieran hecho los comentarios serían "ni con esos puede", así que no hay nada que recriminarles, al contrario, hay que reconocerles, algunos olvidan que ha mantenido el invicto enfrentando a dos de los planteles mas fuerte como Monterrey y Tigres. Cuando muchos esperábamos una tormenta al interior de la institución hoy es todo calma y alegría y, en lo personal, una gran sorpresa, pues tras la salida de Michel a pocos días de iniciar el torneo, el panorama lucía negro y resulta que es color auriazul. Dinenno convirtiéndose en el goleador del equipo, González que empieza a reencontrarse con el gol; en defensa recibiendo pocos goles (6), además de la solidez que en la portería ha llegado a darle Alfredo Talavera y, arriba marcando una buena cantidad (11).

Además, algo que muy pocos destacan, el plantel de Pumas conformado por 28 jugadores del primer equipo, 22 son mexicanos o formados en México y solo seis extranjeros o no formados en México. Andrés Lillini, que se quedó ya como DT, se la ha rifado con varios jóvenes de la Cantera Puma (ojalá sea el renacer) como Gutiérrez, Lira, Rodríguez, Rivas; en promedio en cada partido juegan de arranque de seis a siete jugadores mexicanos y, esto, tiene su mérito. Hoy Pumas está en la parte alta de la tabla, está haciendo valer su condición de local, rescata puntos de visita, este estado de gracia ojalá les aguante hasta el final del torneo, pues hay que recordar que no es cómo empiezas sino cómo terminas. Quizá hasta el momento, una de las desgracias sea lo de Alan Mozo que ha venido a menos, que fue castigado por indisciplina y que sino se pone las pilas quedará relegado a la banca, cuando todo parecía indicar que sería titular indiscutible.

Ahora, sin lugar a dudas, el que en mejor estado de gracia está es Cruz Azul. Todo parece salirle bien a los dirigidos por Robert Dante Siboldi. El equipo que mejores sensaciones deja, el que mejor está jugando al fútbol, el que junto con América más goles ha marcado (14), el segundo en menos cantidad de goles recibidos (5), el que tiene récord inmaculado de local cuatro jugados, cuatro ganados para 12 puntos.

Un Cruz Azul que tiene capacidad de reacción, que nunca baja los brazos, que perdía contra Puebla, inmerecidamente, y en el último suspiro sacó el empate, que perdía contra Juárez y lo terminó ganando. Que tiene en Jonathan Rodríguez a su hombre gol con seis anotaciones en el torneo, que Santiago Giménez también empieza a marcar goles ya lleva dos y parece le ganó el pulso a Caraglio. Un Cruz Azul que no cambia su línea de cuatro en el fondo pero que puede jugar con un trivote en el medio campo, o con dos contenciones, uno mixto y el otro con más características defensivas, que puede jugar con un delantero o dos; tiene variantes y tiene variables. Por lo regular, no se nota cuando alguien entra desde la banca; equipo homogéneo, solido y solidario; con un gran nivel de Corona, Escobar, Romo y Rodríguez, otros que cada vez juegan mejor como Orbelín, Yotún y Jiménez. Un Cruz Azul que quita el balón si le interesa tenerlo, lo puede ceder si le interesa contraatacar; Siboldi lo ha trabajado bien en la cancha y en lo mental, ya no es aquel Cruz Azul que cuando faltaban 10 minutos para acabar el partido le aparecían los fantasmas de echar a perder todo, este equipo es fuerte mentalmente hablando.

Un dato que no es menor, es que es el equipo que más puntos ha hecho en el año y, digo esto, porque con las 10 fechas del torneo que se canceló y las siete que van con el actual ya se hubieran completado las 17 de un torneo corto regular para un total de 38 puntos, cifra que muy pocos equipos alcanzan a llegar, en algún momento Toluca (40), León (41) mismo Cruz Azul (40), en torneos cortos de 17 partidos.

Y no hemos visto a un Cruz Azul completo, todavía falta Pablo Aguilar. Pero ojo, lo que hoy es un estado de gracia de este Cruz Azul se puede convertir en una desgracia, a qué me refiero, a la gran dependencia que tiene de "Cabecita" Rodríguez, si anota la Máquina tiene muchas probabilidades de ganar, sino se complica el asunto.

Contra Santos, Juárez, Atlético de San Luis y Necaxa anotó y el equipo terminó ganando. Contra Puebla no jugó y le alcanzó para empatar, contra Querétaro no anotó y perdieron. El único partido que ganaron sin que Rodríguez anotara fue contra León, que lo ganó 2-0 pero lo definen sobre el final con gol de Jiménez al '89. Una de sus desgracias, es el nivel de Elías Hernández, ha venido a menos y otros que cuando se necesiten tendrán que mostrarse como Caraglio y Borja.

Está máquina pita y está pitando fuerte, está en momento pleno de estado de gracia, algunos no le dan crédito hasta que llegue a la Liguilla y levante el título, pero a cómo lo está haciendo está mas cerca de lograrlo, hasta hoy los problemas extracancha le hacen los mandados, Hasta hoy el azul es el color del estado de gracia, todo le sale.