El legado de Luis Suárez en la Selección Uruguaya excede largamente a lo que hizo en las Eliminatorias Sudamericanas, pero en dicha competición marcó varias de sus mejores historias con la Celeste. El camino del Pistolero con la camiseta de su país en este certamen ha sido plagado de goles importantes, de momentos emotivos y de su constante aporte para que Uruguay sumara puntos que lo llevaran a la Copa del Mundo.
Su último gol por Eliminatorias fue una chilena ante Chile en Santiago, en la última jornada del camino hacia Qatar 2022. “Fue un gol muy importante porque además este fue mi último partido de Eliminatorias. No es una noticia nueva, hoy teniendo 35 años es imposible que pueda llegar a la otra Eliminatoria, pero siempre trato de disfrutar el momento, son momentos únicos e inolvidables que he vivido con la Selección”, confesó, por entonces, en AUF TV una vez finalizado el partido.
Sin embargo, pasó el tiempo, ese “imposible” dejó de serlo y el Pistolero volvió a estar en un plantel de la Celeste por este torneo. En noviembre de 2023 fue suplente en la gran victoria ante Argentina en La Bombonera, y días más tarde tuvo minutos contra Bolivia en el Estadio Centenario. Llegó la Copa América 2024, Suárez jugó en cuatro partidos, marcó un gol clave para forzar los penales contra Canadá y muchos especularon con que iba a ser la última ocasión para ver al temible delantero con la Selección Uruguaya, pero quedaba una función más en la Fecha FIFA de setiembre. Una despedida en su casa y por las Eliminatorias, donde hizo 29 goles en 63 partidos, solo quedando por detrás de su amigo Lionel Messi en la tabla de máximos anotadores históricos. Vale la pena repasar el camino que llevó a Suárez a tener estos impactantes números.
Debut con gol
El trayecto de Suárez en las Eliminatorias no pudo empezar de mejor manera, ya que anotó un gol en su primer partido el 13 de octubre de 2007 en el Estadio Centenario contra Bolivia, que también fue su primer juego “por los puntos” con la Celeste. El delantero, que por entonces jugaba en el Ajax, tomó la pelota en el vértice del área, dejó un rival por el camino y definió cruzado de zurda para el 1 a 0 uruguayo, que terminó venciendo 5 a 0.
En ese camino a Sudáfrica 2010, Suárez marcó cuatro goles más: un remate bajo cruzado en el 2-2 contra Chile en Montevideo, en tiro con poco ángulo en el vibrante empate contra Venezuela en Puerto Ordaz, una exquisita definición a colocar para abrir el marcador en el triunfo locatario ante Colombia y un gol vital para el 1-1 parcial en la agónica victoria en Quito contra Ecuador que ayudó a poner a Uruguay en el Mundial.
En el camino a Sudáfrica, el goleador uruguayo fue Diego Forlán con siete tantos, pero Suárez y Sebastián Abreu compartieron el segundo puesto con cinco dianas y era el comienzo de lo que sería un andar repleto de goles.
Capítulo dos a puro disparo del Pistolero
Tras ser protagonista en la Copa del Mundo 2010 y ganar la Copa América 2011, en octubre de ese año comenzó la Eliminatoria hacia Brasil 2014, sin la selección anfitriona, lo que hacía suponer que sería un camino fácil, pero no lo fue en absoluto.
Suárez, de todos modos, volvió a estrenarse con gol contra Bolivia en el Centenario en la victoria 4 a 2 del equipo del Maestro Tabárez aprovechando una pelota entreverada en el área chica tras un tiro de esquina. Pero fue en la tercera fecha, en Montevideo, donde el Pistolero grabó una de sus mejores noches -sino la mejor- en las Eliminatorias, al destrozar al conjunto chileno marcándole cuatro goles en un 4 a 0 para el recuerdo. Los tantos llegaron con dos potentes remates de afuera del área y con dos cabezazos, demostrando también la versatilidad de un goleador insaciable que pasaba un momento espectacular y que en solo tres fechas ya igualaba la cifra de goles de la anterior Eliminatoria.
A esta marca maravillosa le siguieron un cabezazo que el arquero peruano no pudo despejar para un nuevo tanto en el Centenario en el 4-2 contra Perú, un golazo de tiro libre con sabor amargo en una derrota dura en La Paz contra Bolivia, y una deliciosa volea de primera en el empate como locales contra Paraguay.
En la recta final, con Uruguay complicado con la clasificación y la necesidad imperiosa de ganarle a Perú en Lima, Suárez apareció como siempre y con doblete suyo, la Celeste se trajo los tres puntos y se posicionó en la tabla. Fue uno de penal, y otro tomando de primera un remate furibundo que dio en el travesaño y se metió para silenciar al Estadio Nacional.
El onceavo y último gol de Suárez en esa Eliminatoria llegó en la última fecha, con Uruguay ya asegurado en el quinto puesto, en la victoria por 3 a 2 contra Argentina, de penal, donde también asistió a Edinson Cavani para el gol del triunfo. Los once tantos del Pistolero lo dejaron como máximo goleador de las Eliminatorias rumbo a Brasil superando a goleadores como Messi, Gonzalo Higuaín o Radamel Falcao García.
Trago amargo y vuelta con todo
El Mundial de 2014 le dejó a Suárez los inolvidables goles contra Inglaterra, pero también la ridícula suspensión por cuatro meses tras la mordida a Giorgio Chiellini. En el interín se dio su pase del Liverpool al Barcelona y le tocó perderse las primeras cuatro fechas de las Eliminatorias rumbo a Rusia 2018.
Como tantas veces en su carrera, el destino hizo de las suyas y su vuelta se dio en Brasil, en el país donde fue suspendido y contra la Verdeamarela en un encuentro al rojo vivo en el que llevó la cinta de capitán. En un partido que empezó durísimo para Uruguay, con un gol brasileño antes del minuto de juego, y el 2-0 a los 25’, la Celeste tuvo que remar de atrás y lo hizo con un gol de Cavani y otro de Suárez con una definición de zurda para que los uruguayos presentes en el estadio de Recife deliraran. El Pistolero incluso tuvo la chance de ganarlo en el final, pero una monumental atajada de Alisson Becker le negó lo que hubiera sido un hito histórico en las Eliminatorias.
Luego llegaron un gol de penal contra Paraguay en la fecha ocho en el Centenario, una joya sin nada de ángulo en Barranquilla contra Colombia en el 2-2, y un doblete en la última fecha como locales en el 4-2 sobre Bolivia donde Suárez anotó con una definición de punta y con una media vuelta bien colocada contra el palo.
Suárez terminó esas Eliminatorias con cinco goles, como segundo máximo anotador de Uruguay detrás de Cavani que hizo diez y lideró la tabla de anotadores a nivel continental. Fue el mejor proceso clasificatorio de la Celeste, que terminó segunda, y si bien el Pistolero no marcó tantos goles, su aprendizaje en el Barcelona le llevó a expandir su juego a ser más creador de ocasiones para sus compañeros.
El último baile y el récord
Pasó Rusia 2018, la primera fase perfecta, la eliminación del Portugal de Cristiano Ronaldo y la dolorosa caída contra Francia, y comenzó un nuevo camino clasificatorio. Con la idea reconocida públicamente por el Maestro Óscar Washington Tabárez de que este sería “el último baile” suyo con la Celeste, fue momento de que los uruguayos también tuvieran que reconocer la dura realidad de que también lo sería para muchos de sus referentes. Luis Suárez estaba entre ellos, pero también figuras como Cavani, Diego Godín, Martín Cáceres o Fernando Muslera.
Como en cada uno de sus debuts en Eliminatorias hasta entonces, Suárez anotó en su estreno en la victoria contra Chile en un Centenario vacío debido a la pandemia por Covid-19. Fue el primero de una serie de anotaciones de penal que tuvo el Pistolero en el comienzo de la clasificación hacia Qatar 2022: en la fecha 2 le hizo dos más a Ecuador a pesar de la caída 4-2 en Quito, y en la tercera jornada también anotó uno en el triunfazo contra Colombia en Barranquilla.
En el resto de esta Eliminatoria, al Pistolero le costó llegar a la red y se perdió varios partidos por lesión, mientras que el equipo como conjunto tampoco brillaba y no podía conseguir los resultados. Los referentes eran blanco de críticas y muchos decían que su hora de dejar lugar a sangre más joven había llegado. Apenas consiguió un gol de consuelo en el 1-4 ante Brasil en Manaos -con un gran tiro libre al palo del arquero-. Esto llevó a que la Asociación Uruguaya de Fútbol decidiera sustituir a Tabárez y colocar como entrenador a Diego Alonso, que se estrenó en la fecha 15 contra Paraguay en Asunción.
En ese duelo ante los guaraníes, la victoria fue para Uruguay por 1 a 0 y, cuándo no, el gol fue de Suárez con una gran definición de zurda para traer calma a filas celestes y cerrar por enésima vez la boca de los detractores. En el partido siguiente, ante Venezuela, Suárez volvió a marcar de penal para sellar el 4-1 final para los dirigidos por el “Tornado” y para seguir agrandando su marca histórica en esta competición.
En la última fecha, contra Chile en Santiago, cuando los locales necesitaban ganar para mantener un mínimo de esperanzas de clasificar, Suárez apareció en el área en el segundo tiempo para marcar de chilena el 1 a 0 del encuentro y llegar a 29 tantos en las Eliminatorias.
La despedida
En 2023, con Suárez todavía siendo jugador del Gremio de Porto Alegre, Marcelo Bielsa lo llamó por primera vez en su ciclo y el Pistolero fue parte de la doble fecha de Eliminatorias que tuvo el 2-0 de visitantes contra Argentina (aunque sin minutos suyos), y el triunfo 3-0 en Montevideo ante Bolivia, donde sí pudo ingresar en el segundo tiempo.
Luego de la Copa América 2024, se especuló con que la etapa del atacante con Uruguay se había terminado. El cierre parecía bastante positivo: en el podio del torneo continental, festejando la medalla de bronce junto a todo el plantel y habiendo marcado un gol en el partido por el tercer puesto ante Canadá. Sin embargo, Suárez merecía una despedida en su "patio de juegos", en el Centenario, donde no paró de deslumbrar al público uruguayo. Para la Fecha FIFA de setiembre, Bielsa lo volvió a convocar para enfrentar a Paraguay y Venezuela, y el atacante tuvo su despedida en Montevideo contra los guaraníes.
Debía ser en casa y por las Eliminatorias, torneo en que el Pistolero le marcó a todas las selecciones rivales: su presa favorita fueron los chilenos, que lo sufrieron gritando siete veces un gol por este certamen. Otro dato espectacular que se desprende repasando los goles es que habitualmente los tantos de Suárez abrían los partidos o ayudaban a definirlo y fueron muy pocos los que solo sirvieron para sumar un tanto más en una goleada por amplia diferencia. En total, en 11 partidos marcó el primer gol, en otros seis aportó directamente al resultado final donde se obtuvieron puntos y solo en tres ocasiones anotó en derrotas. Es más, solo en otros tres juegos el Pistolero gritó gol en un triunfo uruguayo y su tanto no fue clave para el resultado.
El legado de Luis Suárez con la Celeste quedará para siempre en las mejores historias de la Selección Uruguaya: un delantero que conquistó el mundo futbolístico y que siempre dejó todo por la camiseta de su país.