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Los diez momentos más emblemáticos de Luis Suárez con la Selección Uruguaya

El Pistolero debutó con la Celeste en 2007, y disputó los Mundiales 2010, 2014, 2018 y 2022. AP Photo

Luis Suárez ha vivido con la Selección Uruguaya momentos inolvidables para la historia del fútbol mundial, además de haber disputado cuatro Copas del Mundo y de convertirse en el máximo goleador de la Celeste.

El Pistolero marcó 69 goles y jugó 142 partidos con Uruguay, siendo uno de los pocos jugadores orientales en disputar cuatro mundiales y el único en la historia de la Celeste en disputar cinco Eliminatorias.

La mano ante Ghana por los cuartos de final de Sudáfrica 2010, MVP y título en la Copa América 2011, los goles y las lágrimas ante Inglaterra, las mordida a Giorgio Chiellini y tantas fotos más.

A continuación repasamos, ordenados cronológicamente, los diez mojones más importantes de Suárez en su historia con la Selección Uruguaya.

El curioso debut ante Colombia: camiseta número 10, partidazo y expulsión

El estreno de Suárez con la Celeste se produjo ante Colombia en un amistoso disputado el 7 de febrero del 2007 en Cúcuta. Bajo las órdenes del Maestro Óscar Washington Tabárez, Lucho fue titular en la banda derecha del ataque celeste que compartió con el Loco Sebastián Abreu y el Turbo Gonzalo Vargas.

Al minuto 13, Suárez, quien jugó con la camiseta número 10 en la espalda, picó habilitado tras pase de Vargas y encaró al colombiano Miguel Calero, golero que le cometió penal y fue expulsado. Abreu remató y abrió el marcador; en el segundo tiempo, el Loco y Vargas anotaron para poner 3 a 0 arriba a la Celeste, y Hugo Rodallega descontó a los 81’.

A falta de cinco minutos para el final, un jugador uruguayo recibió la pelota sobre la banda izquierda y quiso protegerla, pero el árbitro Jorge Hoyos le cobró retención y luego fue empujado por dos futbolistas colombianos. Suárez, quien había tenido una gran actuación, le protestó al juez, quien repentinamente frenó su carrera al escuchar el reproche del Pistolero y le mostró la tarjeta roja. Uruguay ganó 3 a 1, habiendo tenido como titulares a Fabián Carini, Ignacio Ithurralde, Andrés Scotti, Diego Godín, Álvaro González, Egidio Arévalo Ríos, Omar Pouso y Jorge Fucile, Suárez, Abreu y Vargas; en el complemento ingresaron Pablo Castro, Julio Mozzo, Diego Vera y Nicolás Vigneri.

Su primer gol con la Celeste

Luego de su debut en la selección mayor, el salteño disputó el Mundial Sub 20 de Canadá 2007 (la Celeste de Gustavo Ferrín cayó antes Estados Unidos en octavos de final), y en setiembre volvió a ser convocado por Tabárez, ya jugando con la nueve en un amistoso ante Sudáfrica que terminó 0 a 0 en Johannesburgo.

El primer gol de Suárez coincidió con su estreno a nivel oficial: el 13 de octubre de 2007, el equipo oriental recibió a Bolivia en el Estadio Centenario por la primera fecha de las Eliminatorias rumbo al Mundial 2010, y Suárez abrió el marcador a los cuatro minutos del primer tiempo. La Celeste terminaría ganando 5 a 0 gracias a los goles de Lucho, Diego Forlán, Abreu, Vicente Sánchez y Carlos Bueno.

El Mundial 2010: los goles ante Corea del Sur y la mano ante Ghana

Con 23 años y la número 9, Suárez jugó su primer Mundial en Sudáfrica 2010. En la tercera fecha del Grupo A, el Pistolero marcó su primer gol en copas del mundo al anotar el 1 a 0 con que Uruguay venció a México (el partido anterior le habían cometido un penal y había asistido en el gol de Álvaro ‘Palito’ Pereira en el triunfo por 3 a 0 sobre Sudáfrica).

En octavos de final, el salteño marcó un doblete para que Uruguay pudiera meterse entre los ocho mejores (2-1 vs Corea del Sur), y en cuartos de final ante Ghana salvó a Uruguay en el minuto 120, cuando evitó con la mano el segundo gol del combinado africano. Asamoah Gyan erró el penal, el partido terminó 1 a 1, y la Celeste se clasificó a semifinales al imponerse en la definición por penales. El equipo de Tabárez perdería posteriormente 3 a 2 ante Países Bajos (Suárez no jugó por suspensión), y en el partido por el tercer puesto cayó 3 a 2 con Alemania.

Campeón y mejor jugador de la Copa América 2011

Un año más tarde, Suárez tuvo una actuación brillante en la Copa América de Argentina 2011, siendo la gran figura del equipo y del certamen (fue premiado como el jugador más valioso del torneo).

El Pistolero jugó los seis partidos y anotó cuatro goles en la Copa, incluido uno en la final que Uruguay ganó por 3 a 0 ante Paraguay en el estadio Monumental de Núñez.

Pasar a ser el máximo goleador histórico de la Celeste

En junio de 2013, marcó su gol número 32 con Uruguay y superó a Héctor Scarone, quien con 31 fue durante varias décadas el máximo artillero en la historia de la Selección Uruguaya hasta que en octubre de 2011 lo había adelantado Diego Forlán.

El Pistolero pasó a tener más goles que Cachavacha en junio de 2013 al marcar su tanto número 34 con la Celeste; luego hubo alguna instancia donde Forlán lo igualó y hasta volvió a quedar primero con su doblete en agosto de ese año ante Japón, pero en setiembre Suárez convirtió en dos oportunidades ante Perú en Lima, ‘recuperó’ nuevamente la cima y ya nadie pudo alcanzarlo.

Brasil 2014: la recuperación para jugar ante Inglaterra y la mordida a Chiellini

El 11 de mayo del 2014, por la última jornada de la Premier League 2013-14, Suárez recibió una durísima infracción del galés Paul Dummett en el triunfo de Liverpool sobre Newcastle en Anfield por 2 a 1.

Días más tarde se confirmó rotura de meniscos, lo que puso en duda la presencia del salteño en el Mundial de Brasil. En tiempo récord, Suárez pudo recuperarse y jugar el 19 de junio en el Estadio Arena Corinthians de São Paulo por la segunda fecha del Grupo D ante Inglaterra (Uruguay había perdido en el debut 3 a 1 ante Costa Rica).

La Celeste venció con doblete del Pistolero a los 38 y 84 minutos; Wayne Rooney había marcado el empate parcial a los 74. Al marcar el 2 a 1, Suárez no pudo contener las lágrimas y señaló a Walter Ferreira, kinesiólogo que fue fundamental en la recuperación del delantero y que dos años más tarde murió tras luchar contra un cáncer.

Uruguay llegó a la última fecha con la obligación de ganar ante Italia, y lo hizo por 1 a 0 gracias al tanto de Diego Godín, pero horas más tarde se confirmaría una inédita y descomunal sanción a Suárez por parte de la FIFA por haber mordido al defensa Giorgio Chiellini en pleno partido.

El salteño fue expulsado del Mundial, suspendido por nueve partidos oficiales con su selección y vetado de toda actividad futbolística por cuatro meses, incluyendo asistir a estadios y campos de entrenamiento, utilizar las instalaciones de un club o dar declaraciones. Esto motivó, por ejemplo, a que Tabárez renunciara a sus cargos en la FIFA, mostrando su disconformidad por la sanción.

La Celeste, sin Suárez, cayó en octavos de final 2 a 0 ante Colombia (doblete de James Rodríguez).

Sus regresos más esperados

El Pistolero recién pudo defender oficialmente a la Celeste el 25 de marzo de 2016 (no estuvo habilitado para disputar la Copa América de Chile 2015), jugando en Recife ante Brasil por la quinta fecha de las Eliminatorias. Uruguay perdía 2 a 0 ante el Scratch, pero primero descontó Edinson Cavani en el cierre del primer tiempo y luego empató Suárez en el inicio del complemento; incluso el Pistolero tuvo alguna ocasión para darle el triunfo al elenco visitante que debió conformarse con un valioso 2 a 2.

Otro gran regreso de Suárez con la Celeste fue en noviembre de 2023. El argentino Marcelo Bielsa, designado como nuevo entrenador de Uruguay en mayo de ese año, no había convocado al delantero para el inicio de las Eliminatorias rumbo al Mundial 2026, y recién para la última doble fecha del año citó al Pistolero.

Al ingresar ante Bolivia en el Centenario el 21 de noviembre, Suárez recibió el inmenso cariño del público y se convirtió en el único uruguayo en disputar cinco Eliminatorias.

Las lágrimas en Qatar 2022

La imagen anterior a esa vuelta con Bolivia había sido de gran tristeza: el Pistolero lloraba en el banco de suplentes tras ser sustituido en el partido ante Ghana por la tercera fecha del Grupo H del Mundial de Qatar 2022. Uruguay ganaba 2 a 0, pero el triunfo de Corea del Sur por 2 a 1 ante Portugal eliminó a la Celeste.

Ese último partido mundialista de Suárez lo tuvo como una de las grandes figuras, con imágenes de total felicidad, pareciendo revivir él y la Celeste desde las cenizas. La frustración y el golpe de la eliminación en fase de grupos se tradujeron en el llanto desconsolado que le puso fin a una generación inolvidable que en Qatar vivió su cuarta y última Copa del Mundo.

Sus despedidas y el cariño de la gente

En sus últimos años con la Selección Uruguaya, Suárez pareció empeñarse en querer ganarle al todopoderoso e inclemente paso del tiempo, y la hinchada de la Celeste en no querer soltar a su número nueve.

“No es fácil decir basta. El jugador de fútbol no está preparado para el retiro”, reconoció Suárez en diciembre de 2023 al hablar sobre sus dolores de rodilla.

Cuando Uruguay derrotó 1 a 0 a Perú el 24 de marzo de 2022 y se clasificó al Mundial de Qatar, Suárez cortó y se llevó un pedazo de la red de uno de los arcos del Estadio Centenario, saludó a la gente, se despidió y pensó que era lo último.

Pero después de su cuarta Copa del Mundo, regresó en noviembre de 2023 y, ante Bolivia, la gente reconoció y le agradeció todo lo hecho.

Pero luego vino la Copa América de Estados Unidos, el dolor de la derrota en semis ante Colombia, su gol agónico ante Canadá en el partido por el tercer puesto, la medalla de bronce, sus compañeros que lo tiraron para arriba y Lucho que se quedó con la pelota de ese encuentro ante el combinado norteamericano.

“Hay que disfrutar cada momento y cada etapa. Uno no sabe si puede ser lo último, por eso lo disfruto como si fuese un niño”, dijo en DSports tras el choque con Canadá.

Pero entonces la convocatoria para la doble fecha de setiembre, y el partido ante Paraguay. Y aún cuando llegue a tener 60 o 70 años, y esté disfrutando tal vez de sus nietos, el pueblo futbolero y oriental extrañará sus goles, le agradecerá al tiempo la posibilidad de haber coincidido con el Pistolero y, como un reflejo, pedirá su regreso para luego sonreír.