Benfica hizo oficial la llegada de José Mourinho, entrenador portugués que comenzó su carrera con Las Águilas, y que dirigirá a dos futbolistas argentinos en su nuevo desafío: Nicolás Otamendi, Gianluca Prestianni y Enzo Barrenechea. Pero no será la primera vez que dirija argentinos: ESPN.com repasa otros casos de futbolistas que se entrenaron bajo la dirección técnica del Special One y que fueron determinantes para su suerte.
Curiosamente, Mourinho no contó con argentinos ni en su etapa dorada en Porto -hoy su clásico- ni en Chelsea. Pero sí en el recordado Inter que levantó por última vez la UEFA Champions League y en lo que le seguiría a "la etapa más feliz de su carrera", como él la definió.
Inter: su paso exitoso y su primera experiencia con argentinos
Mourinho dirigió un plantel prácticamente extranjero; salvo Materazzi, en el once había futbolistas de todas partes del globo. Y en el plantel, se encontraban Diego Milito -decisivo en la final y en aquella Champions-, Esteban Cambiasso, Javier Zanetti, Walter Samuel y Nicolás Burdisso.
Con esos nombres, el Nerazzurro cosechó su mejor campaña prácticamente de su historia. Consiguió el triplete, levantando la Serie A, Coppa Italia y la Champions por primera vez.
Zanetti fue un hombre clave que recibió el respaldo inmediato del portugués. “Hola, soy José Mourinho, voy a ser tu entrenador y vos vas a ser mi capitán”, le dijo en su llegada. Y el 'Pupi' contó que Mourinho “cambió muchas cosas” en el Inter, especialmente la intensidad y la implicación en los entrenamientos. En particular dijo que los ejercicios tenían variedad, intensidad y gran implicación, y que eso daba “algo más” al equipo en los partidos.
Dos piezas claves de Real Madrid: Di María e Higuaín
Mou llegó para hacerle frente a un Guardiola imparable con aquel Merengue, y le tocó dirigir a dos futbolistas que brillaron bajo sus órdenes, aunque todavía no habían logrado plasmarlo en la Selección Argentina.
En el equipo blanco levantó LaLiga 2011/12, la Copa del Rey 2010/11 y la Supercopa de España 2012.
“Cuando Di María vino a España la gente no sabía por qué venía. Era desconocido y no hizo un buen Mundial, pero tenía cosas que me gustaban: es humilde, con ambición personal aunque para él el equipo está por encima”, expresaba sobre el rosarino en sus comienzos.
Y Fideo se lo retribuyó tiempo después: “Es el mejor técnico que he tenido a lo largo de mi carrera futbolística. Hace que sientas que no es responsabilidad tuya. Te da esa posibilidad y te apoya mucho, también cuando las cosas salen mal (...) Me hizo mejor jugador. Me enseñó muchas cosas, me hizo crecer como futbolista. Me ayudó a moverme en una posición nueva, a tener más sacrificio por el equipo en general".
Sobre 'Pipita', Mou no anduvo con vueltas: “Solo un estúpido querría perder a Higuaín. Es uno de los mejores delanteros centro del mundo", declaraba, mientras el argentino peleaba y se hacía un lugar a pesar de que no dejaban de traerle futbolistas -como Benzema- en su posición.
En Manchester United: Chiquito Romero y Rojo
Mourinho estuvo dos temporadas y media en los Red Devils, en los que compartió plantel con dos futbolistas que luego recalarían en Boca.
Pero con quien más historia tuvo fue con "Chiquito" Romero, reconocido pese a la escasa continuidad que consiguió.
Mourinho lo consideraba un gran recambio, e incluso llegó a pedir públicamente que se quedara en el club como suplente de De Gea, valorando su profesionalismo. “No puedo tener un mejor sustituto que Sergio. No puedo tener un mejor profesional que Sergio", expresó.
En cuanto a Rojo, sus historias son peculiares. Una vez le peló una banana y se la dio para que se recuperara durante un partido.
#ThatMomentWhen those potassium cravings kick in mid-match... 🍌 #MUFC pic.twitter.com/MBdqeGkU84
— Manchester United (@ManUtd) March 16, 2017
Y en otra ocasión, según contó el propio Rojo, Mou intercedió para que no pasara a mayores una pelea que tuvo el defensor con Ibrahimovic -entonces compañero de equipo-, después de que le hiciera un comentario sobre su nariz. "Cuando entró en el vestuario, le dije directamente que cerrara la boca y dejara de gritar. Comenzamos a insultarnos y todos nuestros compañeros de equipo nos estaban mirando. Y en el medio, José Mourinho estaba tratando de calmarnos. Yo seguí puteando, era mi forma de defenderme. Hasta que Mou tuvo que frenarnos, tuvo que intervenir", relató.
Más argentinos, recién en Roma: Paulo Dybala
Debieron pasar algunos años hasta que Mou volvió a tener a un argentino en su plantel, quien fue nada más ni nada menos que Paulo Dybala, quien brillaría bajo sus órdenes con Roma.
Pese a que con La Loba no consiguió ningún título, la relación del cordobés y el portugués fue estrecha. De hecho, tuvieron una conversación clave para que la Joya decidiera su futuro.
Dybala contó que antes de decidirse por Roma, le preguntó a Mourinho qué objetivos tenía el club, qué pretendían ganar, porque él quería jugar en un equipo con ambición. Mourinho le dio certezas sobre el proyecto y lo convenció. Pero también hubo otra historia que reveló el delantero. En una ocasión cuando defendía a Juventus, jugaron con Roma y Mourinho lo elogió personalmente. Durante ese partido, y años después, al ficharlo, le recordó eso y le pidió que esa actitud que tenía como rival tuviera ahora consigo.
Prueba del vínculo que construyeron fue que, tras la obtención de la Copa del Mundo en Qatar, Dybala contó que Mou lo llamó ¡cinco veces! para felicitarlo.
