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El once ideal de Mourinho como entrenador

BARCELONA -- José Mourinho, tras veinte años en los banquillos y habiendo dirigido a ocho equipos distintos, ha entrenado a multitud de estrellas. Elegir un once ideal se entiende una tarea imposible si se quiere acertar con todos, quedando fuera de esa teórica alineación jugadores de la talla de Iker Casillas, Claude Makelele, Zlatan Ibrahimovic, Ashley Cole, Pepe, Cesc Fabregas o Sergio Ramos, entre otros.

Atendiendo al rendimiento y relación con el entrenador portugués, este podría ser ese equipo ideal:

Petr Cech
Portero checo fichado por el Chelsea en 2004, coincidiendo con la llegada de Mou a su banquillo, fue indiscutible en el equipo hasta la incorporación del belga Thibaut Courtois diez años después. Los éxitos en la primera etapa del portugués no se entenderían sin su presencia, siendo muy valorado por el técnico, muy por encima de Casillas o Vitor Baía, con quienes tuvo una relación muy tirante.

Javier Zanetti
Hubo quien pensó que su edad, 38 años, le perjudicaría cuando Mourinho llegó al Internazionale en 2008, pero en las dos temporadas que coincidieron en San Siro el lateral argentino jugó un centenar de partidos, siendo fijo en los esquemas del técnico, para quien fue un colaborador excelente en el trato con la plantilla.

John Terry

Jefe de la defensa del Chelsea y aliado indiscutible del portugués, su titularidad nunca estuvo en duda, siendo uno de los grandes líderes del equipo y voz defensora a ultranza de su entrenador.

Ricardo Carvalho
Probablemente el jugador fetiche de Mourinho, quien le convirtió en indiscutible en el FC Porto, se lo llevó con él al Chelsea en 2004 y le fichó para el Real Madrid en 2010, siendo siempre fijo en sus esquemas. Central de excelente colocación, sabía adaptar a la perfección las órdenes de su entrenador.

Marcelo
Su poco rigor táctico, sobre todo en defensa y a la hora de recuperar la posición, lo solucionó el entrenador portugués atendiéndole de manera personal en las sesiones de trabajo. A pesar de su carácter díscolo que hizo sospechar que pudieran tener problemas -algunos tuvieron-, Marcelo fue indispensable con Mou hasta su lesión en la última temporada del técnico en el Real Madrid.

Xabi Alonso
Mediocampista de gran desempeño y destacada calidad, la llegada de Mourinho al Real Madrid le añadió un fuerte carácter que lo convirtió en uno de los líderes del equipo en el campo, siempre atento a las órdenes de la banda, ya fuera en la construcción o la destrucción del juego.

Frank Lampard

El hoy entrenador del Chelsea es uno de los jugadores con quien mejor congenió durante su primera etapa en Stamford Bridge. Indiscutible en el centro del campo, con Mourinho mejoró ostensiblemente su capacidad ofensiva, siendo, junto a Terry, su mayor aliado en el vestuario entre los jugadores británicos.

Paul Pogba
Llegó a quitarle la capitanía en el Manchester United y le afeó que tuviera poco instinto, pero, a la vez, recuperó la mejor versión del mediocampista francés, convirtiéndole en un todoterreno, con gran fortaleza defensiva y gran llegada al área contraria desde la segunda línea.

Deco: Trascendental en los esquemas del Porto para explicar los éxitos del equipo portugués bajo la dirección de Mourinho, pasó de ser un secundario de lujo en sus primeras tres temporadas a pieza indiscutible en los dos años y medio que coincidieron. Tal fue la importancia que le dio Mou a Deco que quiso llevárselo con él al Chelsea en 2004, tras la conquista de la Champions, pero el brasileño ya se había comprometido con el Barcelona.

Cristiano Ronaldo

Conocedor de su carácter y problemas con no pocos jugadores, el delantero le recibió con reservas en el Real Madrid (había llegado al Bernabéu una temporada antes) pero inmediatamente se convirtió en su estrella indiscutible. Mourinho le recolocó en punta y aumentó exponencialmente su capacidad goleadora, pasando de las 35 dianas en la temporada 2009-10 a sumar 54, 55 y 55 en los tres años que permanecieron juntos. El final de su relación en el Madrid no fue el mejor, pero Cristiano siempre reconoció que con Mou vivió sus mejores años a nivel individual.

Didier Drogba
Llegó con Mou a un Chelsea que ya tenía en plantilla a Mutu y Kezman en 2004 pero, desde un primer momento se convirtió en su delantero innegociable. Su capacidad de lucha, su pelea con cualquier defensa y su excelente olfato goleador provocaron que el entrenador portugués le considerase indiscutible.