CANTON -- Cierto que es un quinto partido de pretemporada y quizás ni siquiera alcanza el nivel de juego interescuadras entre compañeros.
Pero para los Dallas Cowboys debe ser muy positivo estrenar su defensiva como sucedió este domingo en la victoria 24-20 sobre los Miami Dolphins en el Partido del Salón de la Fama.
La nueva defensiva 4-3, encabezada por el coordinador, Monte Kiffin, provocó y recuperó dos balones entregados de los Dolphins en la primera mitad que se tradujeron en par de touchdowns.
El primero fue un balón suelto de recuperado por el tackle, Nick Hayden, en la serie inicial de la ofensiva de Miami; el segundo, una intercepción del apoyador novato, DeVonte Holloman, quien la regresó 75 yardas para touchdown.
Las dos temporadas anteriores, los Cowboys estuvieron entre los cinco peores equipos en balones sueltos provocados e intercepciones, incluida la campaña del 2012 cuando sólo recuperaron 16 balones, la peor marca en la historia de la franquicia.
Una de las mejores noticias fue que nulificaron a los Dolphins la mayor parte de la primera mitad con suplentes en la cancha, ya que de ambos lados del balón abrieron sin titulares.
Incluso, también la mayoría del segundo grupo defensivo y ofensivo de los Cowboys estuvo poco o nada en el campo de juego.
Como se anticipó, Tony Romo y el resto del backfield ofensivo se equiparon, pero ni siquiera pisaron el terreno de juego.
Los únicos titulares en la serie inaugural ofensiva de los Cowboys fueron los tackles Tyron Smith y Doug Free, además del centro novato, Travis Frederick, que jugó casi tres cuartos, también en la posición de guardia derecho.
A la defensiva, el único posible titular que comenzó el juego fue el linebacker externo Justin Durant, quien compite con Ernie Sims para hacer la tercia con Sean Lee y Bruce Carter.
El ala defensiva, George Selvie, fue quien más lució con dos de las tres capturas de Dallas, menos de una semana después de que fue contratado.
En general, fue un buen ensayo para los Cowboys, que en los primeros 30 minutos corrieron para 97 yardas, aunque sólo pasaron para 38 en su mayoría del mariscal de campo novato, Nick Stephens.
El corredor, Phillip Tanner, fue quien mejor lució con 59 yardas en 10 acarreos; seguido por Lance Dunbar con 22.
Tanner pelea por un lugar en la plantilla que abrirá la temporada, quizás con el novato, Joseph Randle, reclutado en la tercera ronda del draft, pero quien ha tenido un lento arranque en el campamento de pretemporada.
Randle estaba considerado para ser el segundo corredor de Dallas, detrás de DeMarco Murray, aunque hasta el momento ha perdido mucho terreno contra Dunbar.
El novato de Oklahoma State cerró bien la parte complementaria con 70 yardas, incluidas un par de buenas escapadas en el tercer cuarto, la más larga de 10 yardas.
Dallas logró 171 yardas por carrera en el primer juego de Gary Brown como asistente de corredores.
La defensiva aceptó los dos touchdowns de los Dolphins en el último cuarto, con jugadores suplentes que tienen mínimas esperanzas de quedarse en el equipo y ya en tiempo basura.
Para los Cowboys fue un buen inicio de pretemporada, en el que el entrenador Jason Garrett denominó como un "partido bono de exhibición".
Los Cowboys tenían programado regresar a su campamento en Oxnard, California, al finalizar el partido, en un viaje de alrededor de seis horas.
El próximo viernes visitarán a los Raiders en Oakland, para su segundo juego de pretemporada, en el que se espera que la mayoría de los titulares juegue al menos un cuarto.