No cualquiera se enfrenta a la presión que implica ejercer la misma profesión que su padre, más aún si este se convirtió en una leyenda mundial, tal como lo intenta el sueco Leo Borg (461°), hijo del histórico Bjorn Borg, ex número 1 del mundo y dueño de 11 trofeos Grand Slam, que este martes debutará contra el español Rafael Nadal (261°) en el ATP 250 de Bastad.
Gracias a otra invitación de la organización, el nacido en Estocolmo, de 21 años y 183 centímetros de estatura, se dará el gusto de batallar contra uno de los mejores jugadores del tenis, de 38 y campeón en 2005, en un duelo de realidades completamente diferentes, producto de que el nórdico no cuenta con demasiada experiencia y pretende instalarse en el circuito, mientras que 'La Fiera' ofrece sus últimas funciones, en la previa de su presentación los Juegos Olímpicos de París.
Generalmente los descendientes no suelen superar a sus exitosos progenitores, especialmente en actividades deportivas, ya sea por falta de cualidades o interés, así como exceso de expectativas, mito que quiere derribar el versátil diestro, que totaliza un triunfo y cuatro derrotas en cuatro participaciones en el máximo nivel, todas a raíz de wild cards recibidas en Bastad y Estocolmo, el cual aún está lejos de emular al irrepetible 'Hombre de Hielo', quien a su edad ya se había encargado de grabar indeleblemente su nombre en el Tour.
“Mi padre nunca me empujó para que fuera tenista ni yo le pregunté por ello. Es evidente que ha sido todo en este deporte. Yo siempre he querido jugar al tenis por iniciativa propia. Sé que está orgulloso de mí, de que lo que estoy haciendo. Espero tener un buen futuro, haré lo posible para que me vaya bien”, había destacado el reciente campeón en el M15 de Kingston en 2021, época en que se probó en las ediciones júniors de Roland Garros, Wimbledon
Instalado en el ámbito profesional desde 2020, justo un mes antes de la explosión mundial del Covid-19, cuando retomaría los entrenamientos en la Rafa Nadal Academy, el ex número 12 del mundo a nivel juvenil acudió en las últimas temporadas al continente sudamericano, donde disputó los torneos Challenger de Buenos Aires, Montevideo, Punta del Este y Sao Leopoldo, enfrentando al argentino Mariano Navone y al brasileño Gustavo Heide, entre otros.
“La pasé mal en mis inicios porque la gente me seguía en la cancha, no estaba acostumbrado. Solo tenía que aprender a controlarlo, porque sabía que me pasaría durante el resto de mi carrera. Ahora ya no me molesta, me enfoco en mis objetivos y en mi juego", confesó Borg, que se define como tranquilo y obstinado, jugó al fútbol hasta los 12, hincha por el Hammarby de su ciudad natal, elige la pasta con salsa de tomate como plato favorito, le gusta el rap y considera a Batman como su superhéroe favorito.
Cabe destacar que el portador de un revés a dos mano disfrutó un 2022 esperanzador, a raíz de su coronación en el M15 de Sharm Elsheikh, al igual que su destacado desempeño en el M25 de Kalmar, M15 de Oran, M15 de Frederiksberg y M25 de El Cairo, ascendiendo del 2.214° al 507° escalafón del ordenamiento para dar un aviso al resto de los contendientes.
Pese a estrenarse en Copa Davis, fallando contra el chileno Cristian Garin, el canadiense Vasek Pospisil y el italiano Flavio Cobolli, proclamarse en dos M25 de Jakarta y firmar su primera victoria ATP, el dueño de una envidiable melena rubia no lograría subir el escalón necesario para continuar su marcado progreso en 2023, principalmente en el segundo nivel, despidiéndose en sus cinco estrenos para cerrar como 369° de la clasificación,
De esta manera, Borg cumplirá un sueño al dirimir contra su ídolo Nadal, tal como lo confirmó en una entrevista a la ITF, aquel con el que compartió un entrenamiento en la previa del cruce de primera ronda, despertando gran interés entre los asistentes presenciales y en las redes sociales.
El ATP 250 de Bastad, a disputarse del 15 al 21 de julio, podrá seguirse en exclusiva por Disney+.