Emma Raducanu (69ª WTA) habla como una jugadora que lleva más de 20 años de carrera en el circuito, pero lo cierto es que ella apenas tiene 21 y pasó por muchas vivencias en poco tiempo.
Explotó en el 2021, cuando ganó sorpresivamente el US Open y ascendió meteóricamente en el ranking hasta que las lesiones comenzaron a opacar su brillo. Tras reiteradas cirugías en sus muñecas y prácticamente nula actividad, en 2024 parece estar recuperando la regularidad que alguna vez tuvo.
Con todo ese contexto y en diálogo con Marie Claire, la británica, nacida en Toronto, Canadá, dejó una reflexión muy interesante en base a su presente y a su futuro: "En el tenis es muy fácil entrar en pánico. Tienes la sensación de que solamente te quedan 10 años de carrera por delante y que todo se va a acabar antes de que te des cuenta. A veces me siento muy vieja con 21 años, pero luego recuerdo en la línea temporal de mi carrera que me quedan 10 años de Grand Slams por delante".
"También hay una gran parte de la vida más allá del tenis. Pensamos que nuestras vidas se acaban cuando llegamos a los 35, pero aún queda mucho por venir. Quiero aprovechar al máximo los años que me quedan en el circuito, pero también tengo que mantener la perspectiva de que hay otras cosas en la vida aparte del tenis", concluyó la ex N°10 del ranking mundial, quien se salteó los Juegos Olímpicos de París 2024 por decisión propia.
En lo que respecta a su actividad reciente, Raducanu alcanzó los cuartos de final del WTA de Washington, donde cayó con la española Paula Badosa (40ª), a la postre campeona del torneo, por 6-4, 5-7 y 4-6.