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El fisioterapeuta argentino se despidió de Sinner tras su sorpresiva salida

En la previa de su quinta participación en Wimbledon, el italiano Jannik Sinner (1°) sorprendió al mundo entero al anunciar un importante cambio en su equipo de trabajo, dejando de contar con los servicios de su preparador físico y de su fisioterapeuta.

"Nada grave ha pasado, cambié de equipo hace no mucho pero no me ha afectado. Les doy las gracias porque hicimos un gran trabajo, pero he decidido hacer algo diferente. No hay una razón específica. En este deporte estas cosas pueden pasar, a veces el jugador siente algo distinto y este ha sido el caso", expresó el vigente bicampeón del Abierto de Australia, que recientemente cedió la coronada en el ATP 500 de Halle, en el clásico Media Day del evento londinense.

Uno de los perjudicados por la inesperada decisión del nacido en San Candido, el cual seguirá encolumnándose en sus dos entrenadores principales, Simone Vagnozzi y Darren Cahill, es el argentino Ulises Badio, licenciado en kinesiología y fisioterapia, quien había asumido el cargo en septiembre de 2024, en reemplazo de Giacomo Naldi, cuestionado por la aparición de la sustancia clostebol en dos controles antidoping que derivarían en la posterior sanción de tres meses.

Integrante de la estructura del serbio Novak Djokovic (6°) desde 2017 hasta 2024, el santafesino, que emigró a Italia a los 22 años para culminar su formación, acumuló experiencia en el fútbol español e integra métodos tradicionales chinos, aprovechó las redes sociales para despedirse públicamente del líder del ranking mundial: "Gracias por el tiempo y los desafíos que compartimos. Adiós, Jannik".

Mientras seguramente considera diversas variantes para rearmarse de cara al futuro, Sinner, el cual también prescindió del aporte de Marco Panichi, debutará contra su compatriota Luca Nardi (94°), en búsqueda de registrar su 75° éxito en competencias grandes.

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