El 'Efecto Caitlin Clark' ha llegado al Mohegan Sun Arena para el inicio de la temporada de la WNBA.
El debut de Caitlin Clark en la temporada regular será un evento imperdible en la WNBA, pero ingresar a la arena se ha vuelto notablemente más difícil.
El Connecticut Sun anunció el lunes que su primer partido en casa contra Clark y el Indiana Fever ya tiene entradas agotadas, con 8,910 entradas vendidas. El Sun dijo que era la primera vez que se vendían todas las entradas para un primer partido en casa desde su primer partido en Connecticut en 2003.
Este tipo de interés se está convirtiendo en la norma en torno a Clark, el ex fenómeno de la Universidad de Iowa y primera selección general en el draft de la WNBA de este año. Ayudó a atraer a 13,000 aficionados a su primer partido en casa: un concurso de pretemporada el jueves contra el Atlanta Dream. Su primer partido de pretemporada, en Dallas, fue frente a un lleno total.
La curiosidad que rodea a Clark hace que algunos oponentes trasladen los juegos a lugares más grandes para acomodar la venta de boletos, y un equipo del Fever que no ha estado en los playoffs desde 2016 ahora tendrá 36 de sus 40 juegos de temporada regular en la televisión nacional.
Jugar frente a un estadio lleno se ha convertido en la norma para Clark, quien ha abrazado plenamente su nueva ciudad natal.
"Para mí, esta es la mejor parte", dijo Clark después del partido del jueves. "Tienes que salir y competir todas las noches, y si una noche no es buena para nosotros, tienes la oportunidad de regresar un par de días después y responder".
En este informe se utilizó información de The Associated Press.