SAN ANTONIO -- Los Golden State Warriors tendrán que esperar hasta mejor ocasión para tratar de romper el maleficio en la Ciudad del Álamo.
Los Warriors sufrieron su derrota 33 consecutiva en temporada regular este sábado en San Antonio frente a los Spurs.
Pero aún, demostraron que son "humanos" y que tienen carencias y falencias que pueden afectar sus aspiraciones de romper la marca de victorias en una campaña regular.
Enseñaron que también pueden cansarse, lastimarse, sufrir apretado calendario y quizá hasta la presión de mostrar juego a juego que son uno de los mejores conjuntos de la historia.
"No puedo estar más orgulloso de mis muchachos", dijo el entrenador de los Warriors, Steve Kerr. "Qué esfuerzo tan increíble. Todas las apuestas estaban contra nosotros...".
"Nueve partidos en 14 días, espalda con espalda", agregó. "Obviamente un partido duro la noche anterior (en Dallas). Sin tres muchachos; tres muchachos importantes en nuestra rotación. Y de todos modos, ahí estuvimos hasta el final".
Los Warriors anotaron su cantidad más baja de la temporada; perdieron batalla de los rebotes 52-35.
Mucho tuvo que ver con la falta del centro titular, Andrew Bogut (dedo del pie), y del reemplazo Festus Ezeli (rodilla), y el delantero Andre Iguodala (tobillo).
"Hubo varios detalles", consideró Stephen Curry sobre la derrota. "En especial extrañamos a nuestros grandes allá arriba. Tuvimos problemas para conectar, tal vez porque estuvimos muy apresurados y no tomamos las decisiones más inteligentes, empezando por mi".
Curry no tuvo una noche para recordar en el primer partido de la historia con dos equipos con al menos 48 juegos de ventaja sobre la marca de .500.
Apenas anotó un triple en 12 intentos y en general sólo cuatro canastas en 18 disparos al aro desde el campo.
Curry, el Jugador Más Valioso de la NBA, fue defendido por nueve diferentes Spurs a lo largo del partido.
"A pesar de la fatiga o de la gran defensiva que pusieron, peleamos duro durante los 48 minutos y nos dimos oportunidad. Obviamente nos hubiera gustado meter un par de canastas más. Nos faltó conseguir un par de balones 50-50 y asegurar posesiones".
"Ellos jugaron duro", añadió. "Pero fallamos algunos tiros que normalmente metemos. Teníamos que encontrar otra manera de impactar en el juego. Hay pocas maneras de jugar contra nosotros para detenernos. Y ellos lo lograron".
Curry, de cualquier manera, logró alargar a 140 su marca de partidos consecutivos con al menos un triple encestado.