El dominicano tuvo que realizar una ardua labor de convencimiento a quien hasta este año utilizó el número que ahora le pertenece
En el mundo existen pocas personas más supersticiosas que los deportistas profesionales. Desde rituales especiales hasta prendas particulares, no es raro ver que un atleta tenga cierto apego a algo que entiende le da la confianza para rendir como se espera. Lo mismo ocurre en el caso de los deportes donde los uniformes llevan números.
No debe de resultar extraño cuando un atleta llega al profesionalismo que desee usar un número con algún significado especial. Desde recordar fechas importantes hasta simplemente utilizar el mismo número con el que han jugado toda la vida, existen múltiples razones por la que los deportistas se apegan a un número.
Prueba de esto acaba de ocurrir en New York Mets con una de sus adiciones más recientes, el jardinero dominicano Starling Marte. El jugador llegó al equipo previo al inicio de temporada 2022 con un contrato de 78 millones de dólares por cuatro años, luego de la que quizás ha sido su mejor temporada en MLB. Sin embargo, cuando llegó se dio cuenta que el número que quería utilizar, ya le pertenecía a otro jugador.
En sus diez años de carrera previos a 2022, Marte solamente había utilizado un par números en sus dorsales, los números dos y seis, siendo este último el que nuevamente quiso utilizar con su nuevo equipo. Sin embargo, al llegar se percató de que Jeff McNeil, quien debutó con los Mets en 2018, era su propietario (a partir del 2019 y hasta la fecha).
De acuerdo con Anthony DiComo de MLB.com, McNeil explicó que su cambio de número para 2022 (ahora utiliza el 1) se debió a que él y Marte habían llegado a un acuerdo.
¿El precio que tuvo que pagar Marte por el número seis? Un reloj de la marca Rolex. A pesar de que McNeil no ofreció detalles sobre el reloj, es bien sabido que la mayoría de las piezas de la referida marca suelen costar miles, decenas de miles e incluso, algunos superan los cientos de miles de dólares. En pocas palabras, no importa el tipo de modelo de reloj que haya regalado Marte por el número seis, no fue para nada barato.
DiComo describió a McNeil como sumamente “sonriente” con su nuevo reloj, pero más allá de eso, la acción demuestra que el estadounidense es un jugador que piensa en el equipo y que no le molesta realizar ciertos “sacrificios” para que haya un buen ambiente. Adicionalmente, con su nuevo número ha iniciado la temporada con el pie, lo mismo que Marte con su número seis.
No es la primera vez que un jugador dominicano llega a New York Mets y realiza este tipo de negociación con otro pelotero que utiliza el número que quiere. Cuando José Reyes regresó al equipo para la temporada 2016, le regaló un Rolex a Travis d’Arnaud para que este le diera su antiguo número siete, mientras que el receptor cambió al número 18.