El dominicano llega a su último año de contrato con Chicago en medio de dudas sobre la posibilidad de cambiarlo o de si estará saludable lo suficiente como para aumentar su valor en el mercado de cambios.
A menos de un mes del inicio de los entrenamientos primaverales, todas las señales apuntan a que el dominicano Eloy Jiménez iniciará su último año de contrato junto a Chicago White Sox. Antes de debutar en MLB, el entonces jardinero, hoy bateador designado, recibió un jugoso acuerdo por seis años y 43 millones de dólares, más dos opciones de equipo para 2025 y 2026, valoradas en 16.5 y 18.5 millones de dólares, respectivamente. Sin embargo, hasta el momento, el equipo no ha podido aprovechar su inversión en quien en un momento fue el mejor prospecto de la organización.
El 2024 probará ser un año vital para Jiménez, quien, en su última temporada de contrato, independientemente de las dos opciones, tendrá que hacer hasta lo imposible para alcanzar una meta que año tras año se le ha complicado, permanecer saludable. De 2019 a la fecha, Jiménez solo ha podido jugar 436 partidos, superando la barrera de los 100 encuentros en dos ocasiones. La mayoría de sus ausencias se han debido a múltiples situaciones de salud y varias visitas al quirófano.
A pesar de esto, cuando Jiménez ha estado saludable ha sido un jugador productivo para White Sox, ahí yace su valor de cara al mercado de cambios. Hasta el momento, el dominicano ha bateado para promedio de .275 con OPS de .811, 89 cuadrangulares y 275 remolcadas, en un equipo que ha sido poco competitivo en términos generales, con las excepciones de las temporadas 2020 y 2021, donde los White Sox alcanzaron la postemporada.
Sin embargo, el valor de Jiménez ha ido decayendo año a año y, los últimos reportes indican que White Sox está teniendo problemas para encontrar equipos interesados en realizar un cambio que involucre al pelotero. De acuerdo con un reporte de Bruce Levine de 670 The Score: “ha habido muy poco interés en el bateador designado de los White Sox, Eloy Jiménez. Se espera que el bateador designado regrese en 2024”, señaló el periodista, al tiempo de apuntar a que cobrará 13 millones de dólares en la próxima campaña. Lo que no queda claro es si el “poco interés” se debe a que los equipos no confían en que Jiménez pueda mantenerse saludable o a si el precio que está pidiendo la escuadra es muy elevada.
De todos modos, para Jiménez será de vital importancia que pueda tener un gran año en MLB y que finalmente pueda probar que se puede mantener en el terreno de juego. A pesar de sus múltiples problemas de salud, 2023 fue un paso en la dirección correcta para el quisqueyano, pero 2024 probará ser la temporada más importante en la carrera del pelotero de 27 años.