Cowboys, Giants, Eagles y Washington apunta a impedir que la NFC Este vuelva a ser la división más floja de la NFL, como sucedió en la pasada temporada
La NFC Este fue el hazmerreír de la temporada pasada, con el Washington Football Team coronándose en la división gracias a una marca de 7-9, pero la temporada del 2021 de la NFL promete cambio y optimismo.
Washington posee una de las mejores defensivas, y quizás, el veterano nómada Ryan Fitzpatrick pueda brindar algo de estabilidad como quarterback. Los New York Giants (6-10) parecer estar al alza con el head coach de segundo año Joe Judge y el regreso del corredor Saquon Barkley. Los Dallas Cowboys (6-10) recuperan a un montón de jugadores de lesiones, sobre todo el quarterback Dak Prescott. Los Philadelphia Eagles (4-11-1) podrían parecer como el equipo que necesitaría más ayuda, pero si el quarterback Jalen Hurts acierta, puede ser una voltereta rápida.
Con los programas de temporada baja completados y los campamentos de entrenamiento en el horizonte, los reporteros de la Nación NFL de ESPN, Todd Archer (Cowboys), Jordan Raanan (Giants), Tim McManus (Eagles) y John Keim (Washington) predicen lo que nos puede ofrecer el 2021.
¿Quién será considerado el Jugador Más Valioso de la división?
Archer: Prescott es la elección sencilla. Hay cuestionamientos obvios en su regreso de una fractura compuesta y dislocación de tobillo derecho, sufridas en octubre pasado, pero ha mostrado que posee todas las respuestas, hasta ahora. Si Prescott recupera su forma, los Cowboys son los favoritos para ganar su división. Fueron terribles la temporada pasada sin él, pero fueron eliminados de la pelea por los playoffs hasta las semanas finales de la campaña. Si Prescott vuelve a ser el Prescott de antes, los Cowboys serán el equipo a vencer. Así que, no solamente será el Jugador Más Valioso de la división, sino podría estar peleando el título de Jugador Más Valioso de la liga, así como Regreso del Año en la NFL.
Raanan: Chase Young sumó 7.5 capturas y cuatro balones sueltos como novato en 15 partidos para Washington la temporada pasada. De mantenerse sano, su total de capturas se duplicará y la defensiva de Washington será una de las mejores en la liga. De hecho, ya lo fue la temporada pasada, y hay pocos motivos para suponer que no lo será nuevamente en el 2021. Solamente que esta vez, será con Young llevando sus talentos al siguiente nivel y consiguiendo números impresionantes, mientras Washington conquista títulos divisionales consecutivos.
Keim: Prescott se siente como la elección más segura por lo que significa a la ofensiva y la franquicia de los Cowboys. El corredor de Washington, Antonio Gibson, es otro a seguir de cerca aquí, pero Prescott conseguirá números importantes, suponiendo que se mantiene sano. En sus 21 partidos pasados, la ofensiva de Dallas ranqueó primera en yardas y segunda en puntos. La defensiva de Cowboys debe responder de gran manera para ganar la división, pero Prescott será el motivo por el cual la estén peleando.
McManus: Los jugadores ofensivos reciben todo el amor, y Prescott considerablemente será elección consensuada aquí, pero tiro los dados con Young, un súper estelar en ascenso. ¿Cuántos otros jugadores en la división se ajustan a esa descripción? Colmó sus expectativas saliendo de Ohio State al acumular 7.5 capturas, cuatro balones sueltos forzados y 10 tacleadas para pérdida de yardaje en ruta a ser nombrado Novato Defensivo del Año en el 2020. No es difícil proyectarlo hacia el tope de la lista de capturas de la liga en esta temporada, al tiempo que se convierte en uno de los jugadores más disruptivos en la NFC Este.
¿Cuál de los rostros nuevos brillará más que el resto en la NFC Este?
Keim: Elijan entre el receptor abierto de Philadelphia, DeVonta Smith, el receptor abierto de Washington, Curtis Samuel, y el receptor abierto de New York, Kenny Golladay. Tomaré a Golladay, quien tiene 27 años de edad y sigue creciendo. Es un objetivo de perímetro de buen tamaño que demostró poder correr rutas desde la ranura y que se ha convertido en una amenaza campo abajo. El quarterback de los Giants, Daniel Jones, ranqueó séptimo entre quarterbacks la temporada pasada en porcentaje de pases completos con lanzamientos de 20 yardas o más en el aire; él y Golladay se conectarán en varios de esos este año.
McManus: Smith, el ganador del Trofeo Heisman reinante procedente de Alabama, no enfrentará una enorme curva de aprendizaje mientras hace la transición desde la SEC a las filas profesionales. Ya es un pulido corredor de rutas con sólida técnica y velocidad engañosa, además de que emplea un control corporal de primer nivel y manos pegajosas para quedarse con todo lo que se lance en su dirección. Su peso (166 libras) es la mayor crítica, pero una carrocería ligera no le impidió vencer coberturas personales de presión y brillar ante algunos de los mejores esquineros en el juego colegial.
Archer: Para los Cowboys, podría ser el coordinador defensivo Dan Quinn. Para los Eagles, podría ser Smith. Para Washington, podría ser, hmmm, ¿Fitzpatrick? Para mí, se trata de Golladay. Su impacto en la ofensiva de New York podría cambiar la configuración de la división. Debe hacer que Jones juegue mejor, lo que hará que Barkley juegue mejor en su regreso de una rotura de ligamento anterior cruzado, lo que hará mejor a Jason Garrett en el mando de jugadas.
Raanan: Golladay. Es exactamente lo que necesitaban los Giants. Es la razón por la que le pagaron 72 millones de dólares, para que Jones pueda lanzar el ovoide en su dirección y esperar que Golladay realice la atrapada difícil, disputada. La última vez que vimos a Golladay jugar una temporada completa en el 2019, lideró a la liga en recepciones de touchdown con 11. Hace que se sienta su impacto inmediatamente en la NFC Este al alcanzar doble dígitos de nuevo esta temporada.
De todos los grandes nombres, ¿quién se destapará en el 2021?
Raanan: Gibson fue tan buen novato para Washington, promediando 4.7 yardas por acarreo y finalizando con 795 yardas terrestres y 11 touchdowns en 10 inicios. El receptor abierto convertido va a tener que explotar en el segundo año como el claro corredor en una ofensiva de Washington limitada. De hecho, Gibson será uno de los corredores más productivos de la NFL y un monstruo para el fantasy. Piensen en 2,000 yardas totales y entre 15 a 20 touchdowns. Esa sería una campaña de destape grandiosa.
Keim: En los siete partidos finales de Washington en el 2020, Young registró cuatro capturas, forzó tres balones sueltos y recuperó otros tres, devolviendo uno para touchdown. Su juego ante la carrera fue excelente, lo mismo que sus instintos. Young empezó a aprender más acerca de presionar al pasador en la NFL; estudia y trabaja todo el tiempo. A eso le sumará una enorme segunda campaña.
McManus: El receptor abierto de los Cowboys, CeeDee Lamb. Fue difícil jugar a la ofensiva una vez que Prescott quedó marginado por lesión en la Semana 5, pero Lamb consiguió terminar la campaña con 74 atrapadas, 935 yardas y cinco touchdowns como novato. Solo imaginen cómo serían esos números si Prescott y la línea ofensiva se mantienen sanos. Una notable diferencia entre sus estadísticas del colegial es que promedió 12.6 yardas por recepción para los Cowboys la temporada pasada, en comparación con 19 yardas por atrapada saliendo de Oklahoma. Ese promedió deberá acercarse más a sus días con los Sooners, con Prescott en el gatillo.
Archer: ¿Cómo no elegimos a Young? Bueno, quizás porque ya tuvo su temporada de destape y no califica. Si es cierto eso de que el jugador da el mayor salto de su primer año al segundo, entonces el resto de la NFL, y no solamente la NFC Este, deben cuidarse.
Es prematuro, pero, ¿cuál asiento comienza como el más caliente?
McManus: Hurts, aunque en realidad no es justo para un joven quarterback con apenas cuatro inicios de por vida que aprovechó una mala situación como relevo de un desastroso Carson Wentz. Los compañeros de equipo han gravitado hacia Hurts, y debe recibir algo de espacio para trabajar, al tiempo que la ofensiva aprende el sistema del nuevo head coach Nick Sirianni. Pero, el plan parece claro: los Eagles han acumulado tres selecciones de primera ronda en el draft de la NFL del 2022, y no dudarán usarlas para adquirir a un quarterback --ya sea canjeando para ascender en el draft o pagándolas por un veterano como Russell Wilson o Deshaun Watson-- en caso de que Hurts no cumpla con las expectativas en el 2021.
Archer: Las expectativas externas parecen bajas para Philadelphia, y mucho de ello se debe a las decisiones que el gerente general Howie Roseman ha realizado desde que los Eagles ganaron el Super Bowl en el 2017. Wentz fue firmado a un masivo contrato por los Eagles y luego canjeado tras dos campañas. El head coach Doug Pederson fue despedido y ahora Sirianni está en su lugar, como novato, a lado de Hurts como su quarterback. El propietario de los Eagles, Jeffrey Lurie, se ha mantenido con Roseman a lo largo de los años, pero en algún punto a todo mundo se le acaba la paciencia.
Raanan: Es una cerrada competencia entre el head coach de los Cowboys, Mike McCarthy, y Jones, el quarterback de los Giants. Simplemente, no hay modo de que la era McCarthy pueda sobrevivir a algo que no sea meterse a los playoffs esta temporada con Prescott sano y el talento en la plantilla. Jones puede mejorar y ser un quarterback de media table en una temporada perdedora, y recibir otra oportunidad. McCarthy no tiene ese lujo. Es ahora o nunca con el head coach de los Cowboys.
Keim: Los Giants sumaron ayuda en receptores abiertos a través de la agencia libre (Golladay) y el draft (Kadarius Toney), y anticipan la vuelta de Barkley. En dos campañas, Jones ha lanzado 35 touchdowns contra 22 intercepciones, pero también ha perdido 14 balones sueltos. ¿Puede o no recortar las entregas de balón? En casi afirmativo, la ofensiva de los Giants será difícil de parar (por supuesto, la línea sigue siendo un problema). En caso contrario, los Giants deben tomar una decisión con respecto a Jones.