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Josh Allen descarta cirugía en el codo para el receso de temporada de los Bills

"El descanso y la recuperación será muy benéfico" para recuperarse del problema en el codo que le hizo modificar la mecánica de pase al quarterback de Buffalo

ORCHARD PARK -- El quarterback de los Buffalo Bills, Josh Allen, dijo que la lesión de codo derecho que sufrió durante la derrota del equipo durante la Semana 9 en contra de los New York Jets, resultó en que tuviera que modificar su mecánica de lanzamiento, y no fue hasta hace dos semanas que fue capaz de regresar a la mecánica que le gusta.

Allen señaló que no hay planes para una cirugía de receso de temporada baja en el codo, y que "el descanso y la recuperación será muy benéfico para ello". Minimizó el impacto de la lesión, inicialmente, durante una conferencia de prensa celebrada este lunes, luego de que los Bills vaciaran los casilleros tras una derrota por 27-10 en la Ronda Divisional de los playoffs ante los Cincinnati Bengals que pone fin a su campaña. Los Bills se convirtieron en el primer favoritos al título en la pretemporada que no alcanzó la Ronda de Juegos de Conferencia desde los Seattle Seahawks del 2015.

"Digo, hubo un periodo, obviamente, justo después por algunas semanas, en que fue bastante molesto, pero de nuevo, realmente no me afectó tanto", admitió Allen. "Simplemente, siento que estaba tratando de lanzar un poco diferente en cuanto a la mecánica, debí cambiar algunas cosas y me alejé un poco de cómo estoy acostumbrado a lanzar el balón. Eso es simplemente un resultado de ello. Pero, de nuevo, no me afectó tanto".

Allen sufrió la lesión durante la última serie de una derrota por 20-17 ante los Jets, cuando el liniero defensivo Bryce Huff logró superar al tackle derecho David Quessenberry, quien estaba reemplazando a un lesionado titular Spencer Brown, y golpeó el brazo de Allen, resultando en captura y balón suelto forzado, recuperado por Buffalo. No se perdió un solo encuentro por la lesión, pero apareció en el reporte de lesionados con el problema hasta el final de la campaña.

Dos de los tres descalabros de la temporada regular de los Bills llegaron antes de la lesión de Allen, incluyendo el de los Jets. Durante las Semanas 1-9, Allen completó el 64.1 por ciento de sus pases para 2,403 yardas, tirando 19 touchdowns contra ocho intercepciones. Su porcentaje ajustado de pases completos fue del 70.6 por ciento.

Sin incluir los partidos de playoffs de los Bills del último par de semanas, cuando Allen dijo poder regresar mecánicamente a lo que le gusta, completó el 62.5 por ciento de sus pases después de la lesión, para 1,880 yardas y 16 touchdowns contra seis intercepciones. Su porcentaje ajustado de pases completos durante ese periodo fue del 71.8 por ciento.

"Pienso, realmente, hace dos semanas es cuando sentí que pude regresar mecánicamente a lo que me gusta", dijo Allen, cuando se le preguntó específicamente respecto al impacto de la lesión a su juego. "De nuevo, siendo un lanzador rotacional, es muy prevalente en el codo, y quizás utilicé un estilo más linear porque realmente no podía utilizar toda la fuerza, pero de nuevo, simplemente adaptándome".

Allen mostró la diferencia con el brazo, dado que típicamente lanza con cierto ángulo lateral, pero obligado por la lesión a lanzar de un modo más vertical.

La ofensiva de los Bills se vio plagada por una serie de problemas en varios puntos de la campaña, incluyendo el liderato de la liga en pases dejados caer, el nivel inconstante de la línea ofensiva, y temas en el llamado de jugadas bajo el coordinador de primer año, Ken Dorsey.

Allen, quien ayudó a conducir a los Bills a los playoffs en cada uno de los cuatro años pasados, finalizó la temporada con 23 entregas de balón --incluyendo la postemporada-- la mayor cantidad para un jugador a lo largo de los últimos tres años. Dijo que se tomará un tiempo detenido para estudiar el problema de las entregas y comprender "a las defensivas tan bien como pueda y ajustar tan bien como pueda y realizar la jugada correcta a futuro, y de nuevo, permitir a esta ofensiva mantenerse sobre el campo".

Múltiples jugadores en el vestidor de los Bills hablaron este lunes respecto a cómo, después de un mes emocional --desde una tormenta de nieve severa en Buffalo hasta la lesión y arresto cardiaco del safety Damar Hamlin en su encuentro de temporada regular contra los Bengals-- hubo fatiga y el equipo se "detuvo, desde un punto de vista de energía", como describió el ala cerrada Dawson Knox, luego de un déficit temprano de 14-0 en contra de los Bengals el domingo.

"La adversidad que este ha equipo ha tenido que superar", notó Allen respecto a lo que se quedará de esta campaña del 2022. "Hay muchas cosas que sucedieron a este equipo de fútbol americano que no sé si hayan sucedido antes. Simplemente, batallar a través de eso con estos chicos en el vestidor y todos confiando unos en otros. Obviamente, queremos ganar. No se equivoquen respecto a eso. Pero, estoy orgulloso del modo en que este equipo fue capaz de pelear a través de algunas de las cosas que enfrentamos".

Por lo que respecta en específico al quarterback, cuando se le preguntó lo que aprendió de sí mismo en la temporada, hizo una pausa antes de responder, "Tengo mucho por aprender. Mucho más para crecer, un camino largo por recorrer".