El QB de Ravens, Lamar Jackson, no enfrenta sanciones por su altercado con un aficionado de los Bills en la Semana 1.
OWINGS MILLS, Maryland -- El mariscal de campo de los Baltimore Ravens, Lamar Jackson, no enfrentará sanciones por parte de la NFL por su altercado con un aficionado de los Buffalo Bills durante la derrota por 41-40 en el partido inaugural de la temporada, según declaró un portavoz de la liga el jueves.
"El club ha abordado el asunto y la liga no tomará ninguna otra medida", escribió el portavoz de la NFL, Brian McCarthy, en un comunicado.
El domingo por la noche, Jackson celebraba con algunos compañeros cerca de la primera fila del Estadio Highmark tras lanzar un pase de touchdown de 29 yardas a DeAndre Hopkins al final del tercer cuarto. El aficionado, que vestía una camiseta roja de los Bills, golpeó inicialmente a Hopkins en el casco antes de hacer lo mismo con Jackson, quien inmediatamente lo empujó con ambas manos, haciéndolo caer hacia atrás.
El aficionado fue expulsado del estadio el domingo por la noche. Además, se le ha prohibido la entrada indefinidamente a los estadios de los Bills y de la NFL, según informó un directivo del equipo a Adam Schefter de ESPN el lunes.
El miércoles, el gerente general de los Ravens, Eric DeCosta, tuvo una larga conversación con Jackson. El equipo busca evitar futuros altercados como este.
"La seguridad de nuestros jugadores es de suma importancia", le dijo un oficial de los Ravens a Schefter. "Hemos hablado con Lamar, quien comprende el impacto de la situación, sobre el incidente.
"Si bien mantendremos la privacidad de los asuntos internos, hemos implementado protocolos de seguridad adicionales, tanto en casa como fuera, para proteger mejor a nuestros jugadores y gestionar las interacciones negativas con los aficionados en el futuro".
El miércoles, Jackson se disculpó con el aficionado durante su sesión semanal con los medios y le sugirió: "Tranquilo la próxima vez. Puedes provocar, pero mantén las manos quietas".
Unos 10 minutos después del incidente de Jackson con el aficionado, el corredor de los Ravens, Derrick Henry, casi fue golpeado con una botella de agua congelada en la zona de anotación, al otro lado del estadio, tras su carrera de touchdown de 29 yardas en el último cuarto.
"Cosas así no deberían estar sucediendo. Esto no es la WWE", dijo Jackson. "Estamos jugando fútbol americano acá. Así que solo fútbol americano. Sé que los chicos dirán cosas que provoquen. Sé que el equipo contrario dirá groserías. Que se quede así. Pero mantengan sus manos quietas y sus objetos también".