MIAMI GARDENS -- En una rivalidad que tiene 104 compromisos de temporada regular, los Miami Dolphins y los New England Patriots nunca habían vivido algo como lo del domingo. La explosión de la formación Wildcat fue hace una década y también resultó en una sorpresa, pero esto fue con sólo 17 segundos en el reloj, una jugada de 69 yardas que incluyó dos laterales, un par de bloqueos a campo abierto y una decisión extraña de los visitantes sobre el personal en el campo. De acuerdo con la probabilidad de triunfo de ESPN, los Dolphins pasaron del 99.9 de posibilidades de perder a una victoria.
"Nunca he visto algo como esto en toda. Fue una maldita locura", dijo el receptor Danny Amendola.
Los Dolphins estaban en su propia yarda 31 con siete segundos por jugar, perdiendo por cinco puntos. Llegaron a esa situación tras limitar a un gol de campo a los Patriots en su posesión previa. Fue entonces cuando Adam Gase mandó la jugada "Boise", una similar a la que realizaron los Boise State Broncos en el Fiesta Bowl del 2007 ante Oklahoma.
Esta indicaba que Ryan Tannehill enviara un pase de 15-20 yardas al receptor Kenny Stills en un ruta corta para después pasarle el ovoide a DeVante Parker. Posteriormente él encontraría al corredor Kenyan Drake en otro lateral. Posteriormente se encomendarían a que él u otro jugador encontrara un espacio y quizá rompiera algunas tacleadas.
ESPN habló con varios jugadores de ambos equipos para entender qué ocurrió:
No es un Ave María
Los Patriots estaban en defensiva preventiva y sin ser agresivos. Curiosamente, su última línea de defensivos incluía al ala cerrada Rob Gronkowski, quien presenta una lesión por múltiples semanas. Tras el compromiso, Tannehill y Gase señalaron que un Ave María no estaba entre los planes porque no hubieran llegado a la zona de anotación.
Drake tomó el ovoide tras un par de laterales de Stills y Parker y se escapó 52 yardas por las laterales.
Drake: "Esa fue la última parte de la jugada que fue diseñada. Soy el último vagón. Era un poco a lo que juegas en el patio de tu casa. Estaba buscando alguien a quien pasarle el ovoide y tenía que asegurarme que fuera para atrás. No tenía a nadie cerca, por lo que tuve que improvisar".
Bill Belichick: "Sí, pudieron hacer un pase más profundo. Una jugada desesperada, que está en el rango de las 20 yardas y después empezar con la desesperación [múltiples laterales".
Duron Harmon, esquinero de los Patriots: "Sabíamos que iban a intentar los laterales. El balón estaba en la yarda 31 y nosotros no estábamos pensando que era un Ave María, por lo que no mandamos a todos para atrás".
'Pásala, pásala'
Los Dolphins practican la jugada "Boise" cada semana, incluido el viernes pasado, como parte de la preparación para el juego. Suelen hacerlo ante la defensiva que plantará el rival según sus análisis y sin linieros ofensivos, por lo que no hay una real sensación de lo que pueda ocurrir en los partidos.
Algunos bloqueos claves impulsaron a Drake hacia la zona de anotación, pero el que realizó el guardia Ted Larsen sobre Patrick Chung en la yarda 30 fue la diferencia.
Tannehill: "Estaba siguiendo todo el desarrollo. La jugada se estaba tornando en un desastre. Vi que Kenny estaba en posición y sólo pensaba ´¡pásala! ¡Pásala!. Lo hace, KD [Drake] aparece y hace un corte hacia adentro --tenía una gran visión de todo-- y es cuando vi que Gronk estaba como 10 yardas. Fue ahí cuando dije ´Gronk está en el campo. ¡Lo tenemos! Fue impresionate".
Stills: "Honestamente, creo que debo atrapar el balón y pasarlo un poco más rápido".
Parker: "Cuando lo atrapé, sólo quería ganar más yardas. Hice lo que pude y después se la pasé a KD".
Gase: "En un punto estaba un poco molesto con DeVante porque creo que tuvo oportunidad de darse vuelta y correr, pero tomó la decisión correcta".
Harmon: "Creo que otorgamos un buen colchón, pero al final, todo se volvió un desastre y ellos pudieron encontrar un espacio".
Larsen: "Sé que debía bloquear y dejar que los habilidosos hicieran la jugada. 'No dejes que te derriben con el balón' es el nombre del juego. Yo sólo quería bloquear para que así no me pasaran el ovoide".
Jonathan Jones, esquinero de los Patriots: "Todo ocurrió muy rápido".
'Debo estar un lugar'
Toda la jugada tomó 17 segundos, pero fueron los últimos segundos los que la gente siempre recordará. Drake sólo tenía que superar a Gronkowski y fue ahí cuando el ala cerrada se tropezó para que el corredor llegara a las diagonales.
Drake: "Una vez que superé al esquinero y al apoyador, eramos Gronk y yo. No podía dejar que él me tacleara. Lo siento, Gronk. Eres un gran jugador, pero debo estar en un lugar".
Gronkowski: "Sí me tropecé un poco, pero así es el deporte".
Tannehill: "Drake tiene un tiempo de 4.3 segundos y Gronk probablemente 4.6 o 4.7, por lo que sabía que el enfrentamiento era favorable".
Gronkowski: "Sólo vi que empezaron con los pases laterales y ese tipo de cosas. No pensé que fueran a llegar adonde yo estaba y ya fue cuando entonces vi que tomó campo abierto. Ustedes vieron lo que pasó".
Gore: "Cuando vi que dobló la esquina, sabía que ya se había escapado".
Euforia e incredulidad
Tras el juego, en el vestidor de los Dolphins había mucha euforia. Los jugadores de Miami cantaban "Ted, Ted, Ted" en honor a Larsen. Drake estaba abrumado por las entrevistas. Los Patriots no podían creerlo. ¿Cómo pudo pasar eso?
Cinco minutos después del partido los jugadores de Miami seguían describiéndolo como una de las mejores experiencias que han vivido.
Drake: "No sabía si había castigos en la jugada. ¿Realmente acabo de hacer eso? ¿Hay tiempo en el reloj? Muchas cosas me pasaban por la cabeza. Lancé el balón a la tribuna, así que me ganaré una multa de la NFL, pero estoy listo para recibir ese golpe en el mentón".
Josh Gordon, receptor de los Patriots: "Vaya que es complicado. Una jugada de último segundo en un juego de ese tipo o la forma en que terminó el partido, nunca lo había visto en mi carrera. Quizá en colegial, pero fue un juego extraño".
Akeem Spence, tackle defensivo de los Dolphins: "Cuando llegó a las laterales dije 'debo meterme al campo, eso lo único que puedo hacer. Me acerqué a la primera persona que vi y lo abracé: era Adam Gase".
Stills: "Esto estará en los libros de historia de la rivalidad Patriots-Dolphins. Es un gran sentimiento".
Mike Reiss de ESPN contribuyó con este reporte.