El esquinero de los Arizona Cardinals, Josh Shaw, no continuará con su apelación por el castigo que le impuso la NFL por apostar.
Shaw fue suspendido al menos hasta la temporada del 2020 luego que una investigación de la liga encontró que había apostado a partidos de la NFL en múltiples ocasiones este año. La NFL anunció el castigo el 29 de noviembre y Shaw presentó su apelación el 3 de diciembre.
La NFL colocó a Shaw en la lista de reservas/suspendidos por el comisionado" luego de que su apelación fue anulada.
Shaw, quien está en su temporada en la NFL y primera con los Cardinals, ha estado en la lista de reservas lesionados desde agosto y no ha estado cerca del equipo. Es elegible para pedir su reinstalación a partir del 15 de febrero del 2021.
El 10 de noviembre, Shaw hizo una apuesta parlay de tres equipos en un casino de Las Vegas, lo que, en parte, provocó la investigación de la NFL. La apuesta, que una fuente aseguró que de unos miles de dólares, fue sobre tres partidos que estaban en la segunda mitad en la Semana 10, incluyendo a los Tampa Bay Buccaneers, que enfrentaron a los Cardinals, el equipo de Shaw.
Los Buccaneers iban venciendo a Arizona 17-13 al medio tiempo y eran favoritos por un punto en la segunda mitad. Tampa Bay no cubrió la línea en la segunda mitad, pero terminó derrotando a los Cardinals, 30-27, y Shaw perdió su apuesta.
Caesars Entertainment, que opera el casino que aceptó la apuesta de Shaw, alertó a la agencia de control de apuestas de Nevada y posteriormente a la NFL. Shaw se reunió con un oficial de la liga de inmediato y cooperó con la investigación, señalaron las fuentes a ESPN.
La NFL no encontró ninguna evidencia que Shaw utilizara información privilegiada para realizar sus apuestas o que algún partido hubiera estado comprometido. La liga dijo que los compañeros y entrenadores de Shaw u otros jugadores no estaban al tanto de su apuesta.
"El éxito continuo de la NFL depende directamente de que cada uno de nosotros haga todo lo necesario para salvaguardar la integridad del juego y las reputaciones de todos los que participan en la liga. En el centro de esta responsabilidad está el principio que apostar a partidos de la NFL, o cualquier elemento del juego, pone en riesgo la integridad del juego, daña la confianza del público en la NFL y está prohibido en todas las circunstancias", declaró el comisionado Roger Goodell en un comunicado. "Si trabajas en la NFL, no puedes apostar en el fútbol americano de la NFL".
La suspensión de Shaw es la primera violación reportada de la política de apuestas en ligas profesionales importantes desde que una resolución de la suprema corte de los Estados Unidos abrió un camino para que los estados autorizaran las apuestas deportivas. Una docena de estados además de Nevada ahora ofrecen apuestas deportivas y varios más han aprobado leyes para permitir casas de apuestas deportivas en los próximos años.
Shaw es el primer jugador de la NFL que es suspendido por apostar desde 1996, cuando Jon Stark, mariscal de campo novato de los Baltimore Ravens, fue castigado luego que la liga recibió una denuncia anónima.