Pasó la ida de los cuartos de final de la CONMEBOL Libertadores 2025 y River Plate y Estudiantes de La Plata perdieron por un gol de diferencia contra Palmeiras y Flamengo respectivamente, resultados que los mantienen con vida de cara a las revanchas.
Las situaciones son diferentes, porque el equipo de Marcelo Gallardo perdió de local y el de Eduardo Domínguez lo hizo de visitante, pero ambos partidos fueron similares y los dos afrontarán los encuentros de vuelta con las posibilidades intactas cuando en el inicio parecía que las series podían liquidarse en la ida.
Palmeiras y Flamengo son los grandes candidatos a llegar a la final de la Copa. Por presupuesto, historia reciente, individualidades y funcionamiento, los clubes brasileños exhiben un favoritismo rotundo. De todos modos, sus rivales argentinos demostraron, de diferente manera, que pueden competir.
Tanto River como Estudiantes estuvieron dos goles abajo en el marcador en el primer tiempo y descontaron sobre el final, lo que les deja una sensación positiva. De todos modos, las realidades de ambos son diferentes.
River fue superado con amplitud por Palmeiras en el Monumental durante los primeros 45 minutos. No hubo equivalencias y si eso se repite en Brasil, no hay futuro para el conjunto de Gallardo en la Copa. Que la revancha sea más parecida al segundo tiempo es el objetivo de Gallardo.
Tiene poco margen River, está claro. De visitante y contra un rival nítidamente superior, deberá hacer un partido perfecto, algo de lo que estuvo muy lejos en Buenos Aires. Sin Driussi, además, pierde una pieza clave en ataque. Deberá apoyar sus argumentos en la experiencia y ser infalible en ambas áreas.
Por supuesto, Estudiantes tiene la ventaja de la la localía. El gol agónico le permite planificar el partido con la única necesidad de ganar. Una victoria por un gol lo llevará a los penales, donde las diferencias de jerarquía se acortan.
Lo mejor que puede sacar Domínguez del encuentro de ida es que su equipo demostró carácter y no se desanimó después de los dos goles temperaneros. Esa fortaleza mental puede conducirlos a dar la gran sorpresa de la Copa.
En definitiva, River y Estudiantes llegan a las revanchas derrotados pero vivos. Necesitarán exprimir al máximo sus virtudes contra los favoritos para meterse en semis y en eso trabajarán en estos días.