El argentino Sergio Egea asumió la dirección técnica de Xelajú MC en noviembre del año pasado, después que el nacional Horacio González dimitiera por los malos resultados. Hoy. el equipo con cinco títulos de Liga Nacional, se ubica en la novena posición con 13 puntos y tiene la obligación de meterse entre los seis primeros para volver a pelear por el centro, algo que no consigue en los últimos dos campeonatos.
En medio de la suspensión de actividades, debido a las medidas de prevención por el COVID-19, el estratega sudamericano conversa con ESPN y es optimista con el futuro de su equipo, aunque afirma que lo primero es que todos salgan bien librados de la crisis.
"El deporte queda en segundo término, lo importante ahora es la salud de la gente que está sufriendo. Nosotros veníamos compitiendo e íbamos de menos a más, pero eso ahora no supone nada especial", menciona.
La Federación Nacional de Fútbol estableció el 23 de mayo como fecha límite para que el torneo Clausura 2020 se pueda reanudar, de lo contrario la temporada se decretará como finalizada. El estratega brinda una opción para que el campeonato concluya, si el número de infectados no aumenta.
"Yo siempre soy positivo. Si tenemos dos semanas de preparación física podríamos empezar a jugar. Quedan nueve jornadas de la fase regular, la liguilla se podría jugar a partido único. Si los casos se estabilizan está semana podríamos empezar a entrenar por grupos y arrancar el 9 de mayo, como tenía pensado la liga", apunta el estratega.
Tema físico
Los jugadores trabajan bajo un plan estricto y podrían existir sanciones económicas de no cumplir con lo estipulado, "creo que hemos hecho bien el trabajo físico, llevamos cinco semanas y se ha hecho mucho hincapié en los menús de las comidas, donde marcamos con el peso que se fueron y deben de volver con un kilo de exceso, no más, sino habrá disciplinas del club en el aspecto económico", comenta.
"Estamos creciendo, a veces hay muchas cosas que no se ven porque el espectador en general solo mira el partido. Nosotros hemos trabajado mucho en mejoramiento del estadio, los camerino y la gramilla donde buscamos una pelota rápida y mejor control. Hemos crecido como institución, pero el resultado marca muchas cosas”, expresa sobre el balance que hace de su estadía en la institución.
Preocupado por el COVID-19
El técnico de los altenses hizo carrera en España, país en el que radica gran parte de su familia. Eso, a él y a su esposa, le roba el sueño por estos días.
"La verdad esta es una enfermedad muy cruel y que ha pegado bastante fuerte en Europa. Llevo 40 años residiendo en España, ahí tengo a mis hijos y nietos, están tan lejos que preocupa, pero tengo a mi esposa aquí en Xela y estamos hablando a distancia".
Confiesa que varios de sus amigos han sido víctimas de la pandemia. "En España han fallecido varios amigos: el presidente del Real Madrid cuando yo estaba en la filial, Lorenzo Sanz. También dos amigos entrenadores que tuve y estaban en una edad complicada", menciona con nostalgia.