Claudia Rivas, psicóloga deportiva, recomendó que el futbolista debe realizar trabajo comunitario como parte de su terapia tras ser liberado
GUADALAJARA -- El delantero mexicano Joao Maleck salió del reclusorio en Jalisco, Puente Grande, donde estuvo los últimos 18 meses después de sufrir un accidente automovilístico, y en cuyo evento fallecieron dos personas.
Ante esta situación, la psicóloga deportiva, Claudia Rivas, mencionó que parte de la terapia del elemento de Santos debe saldar su deuda con la sociedad a través del trabajo comunitario.
“El trabajo comunitario se debe hacer porque es parte de la terapia clínica. De lo que más daño le hace a las personas es esa sensación de culpa, diferente a la responsabilidad. Soy responsable de mis acciones y quiero reparar un daño, pero no puede regresarles la vida a esas dos personas, entonces lo que hacen mucho es el trabajo comunitario. A partir de ahí está el autoperdón, hacer un compromiso, estar situado en el aquí y ahora. Más allá de la carrera futbolística, pues continuar su vida”, dijo.
La especialista, que trabaja actualmente en el Club Puebla señaló que Maleck tiene que ayudar a otros jóvenes a evitar repetir este suceso y su experiencia ayudará a crear consciencia entre los jugadores juveniles.
“El trabajo comunitario es importante, porque es reparar un daño, aunque nada va a regresar la vida de este matrimonio, pero el hecho de ayudar a otras personas, concientizar a otros jóvenes a través de su experiencia nos ayuda a saldar esta deuda social y prevenir que alguien más eche a perder su vida como deportista y como persona”, mencionó la psicóloga que tiene especialidad en sicología clínica.
“Esta cicatriz le queda toda la vida, hay gente que lo asimila, pero la idea mental y la acción de la recuperación del daño hará menos esa culpa. Una vez que el daño está hecho es trabajar en el auto perdón y algo que ayuda mucho es hacer algo por lo demás”, expuso.
Rivas reconoció que dentro de los clubes se trabaja poco el trabajo de prevención, ya que se enfocan más en el aspecto deportivo, pero recordó que en 2010, cuando estaba con el Club América, trabajaron con las categorías inferiores el episodio que vivieron con Salvador Cabañas, quien en ese entonces era la figura del club y dio por terminada su carrera en el máximo rendimiento después de recibir un impacto de bala en la cabeza.
“Creo que muy pocos trabajan. Incluso los clubes en los que trabajamos estamos tan enfocados en la situación de rendimiento, que estos temas se nos pasan. Cuando pasó lo de Cabañas y en ese momento estábamos en América lo hablamos con los jóvenes. Es algo a lo que deberíamos poner situación especial tanto clubes, como sicólogos que estamos en clubes”, concluyó.