El director ténico holandés recuerda con simpatía la ocasión en que la afición agradeció un triunfo contra América
El holandés Hans Westerhof, ex entrenador de las Chivas, señaló que en el futbol de su natal Holanda les dicen “felicidades”, pero nunca “gracias” por ganar un partido, cosa que sí experimentó en el balompié mexicano con los aficionados de las Chivas, cuando como director técnico del ‘Rebaño’ venció al América de su compatriota Leo Beenhakker, en el Apertura 2003.
Con motivo del Clásico Nacional del próximo 14 de marzo, Hans Westerhof dijo a ESPN Digital que recuerda perfectamente el resultado de su primer juego ante el América como estratega del ‘chiverío’: un 1-2 como visitante en el Estadio Azteca.
Recordó Westerhof que a ese partido la prensa le llamó el ‘Clásico de los tulipanes’, “porque el director técnico del América era Leo Beenhakker. Leo y yo jugamos algunos Clásicos en Holanda; yo era director técnico de PSV y Leo del Ajax, y en México otra vez nos tocó enfrentarnos en un Clásico, y ganamos”.
En ese cotejo, Omar Bravo consiguió el gol del gane al ‘82 de acción, luego de que Sebastián Abreu abriera el marcador al minuto 27 y Miguel Sabah hiciera el del empate al 44’.
“Leo y yo somos amigos. Para nosotros era muy importante ganar este partido, porque teníamos un pequeño chance para entrar al repechaje; en la semana siguiente le ganamos al Atlas, pero no pudimos entrar a la Liguilla, perdimos el repechaje contra Toluca”.
“Lo que siempre recuerdo es que jugamos en el Azteca, con muchísima gente, y había gente con camiseta del América y al lado había gente con camiseta de Chivas, y sin problemas. En ese tiempo había problemas en Europa y se pararon partidos, pero en el Azteca no… nunca se ve eso, nunca (violencia). Es raro, porque en el equipo de Chivas hay jugadores que piensan como objetivo, sobre todo en un clásico, que ‘vamos a la guerra’, pero Salcido, Bravo, Ramón Morales, ellos piensan que el partido es una fiesta. Es raro que en un mismo equipo uno piense que es guerra, el otro piensa que es fiesta. Qué raro, ¿no?”.
--¿Ese partido ameritó una preparación especial de parte suya?
“No creo, no; para nosotros casi siempre era lo mismo. Para mí sí, pero para ellos no. Por supuesto, América, con muy buenos jugadores: Cuauhtémoc, ‘Loco’ Abreu, Germán Villa, muy buen jugador… Por supuesto, es diferente, porque hay mucho más atención antes del partido, sobre todo de los aficionados”.
“Me acuerdo que después del partido, los aficionados de Chivas esperaron cerca del autobús y la gente dijo: ‘Gracias’. No dijo, ‘felicidades’, dijo ‘gracias que ganaste el partido para nosotros’. Eso es muy raro para mí, porque en mi país dicen ‘felicidades’, nada más, pero nunca ‘gracias que ganaste para nosotros’. Eso a mí me gustó mucho, claro”.
Asimismo, afirmó que en su estancia con las Chivas, entre 2003 y 2004, nunca recibió una mala palabra de la afición rojiblanca, tras una derrota: “Normalmente quedaban contentos con nuestra manera de jugar; jugamos un futbol ofensivo, jugamos con mucho riesgo. Perdimos la final contra Pumas, en penales, pero tampoco es que estuvieran enojados. Regresamos a Guadalajara y había muchísima gente en la glorieta La Minerva, me acuerdo. Jugábamos siempre muy espectacular y eso para los aficionados era muy importante... Jorge (Vergara) decía siempre: ‘A veces perdemos, pero siempre perdemos como los grandes’”.
Y, a propósito de que en México se reconoce el tipo de juego que desplegaban aquellas, ‘sus’ Chivas, comentó orgulloso: “En un viaje a Pachuca hace cuatro años, yo estaba junto con un periodista de Holanda y encontramos a un hombre que era directivo del América (no recordó su nombre), y él le dijo al periodista de Holanda: ‘Este hombre’, o sea yo, ‘este hombre cambió el futbol mexicano”.
El reto de Solari con América
-- ¿A qué cree que se enfrente Santiago Solari en el América, como técnico formado en Europa?
“Él fue un buen jugador, obtuvo su licencia como director técnico en Europa y él también habló sobre las diferencias entre Europa y México, como yo: que en México hay muchísimo talento, pero a veces se tiene que trabajar más en él profesionalismo… Creo que también poco a poco en México hay cambios, porque hoy en día se pueden ver todos los partidos de todo el mundo; hay muchos programas para ver cómo entrena Klopp en Liverpool, o Koeman en Barcelona”.
“Pachuca sub 20 y sub 17 son líderes, no es coincidencia. En Pachuca trabajamos (sic) en cómo puedes fomentar el profesionalismo dentro y fuera de la cancha y por eso no es coincidencia en estos momentos que sean líderes en fuerzas básicas, porque trabajan bien”.