MÉXICO -- Javier Aguirre le pedía que se rapara por completo para impresionar más a los rivales que jugaban contra México. Fue un mediocampista duro, siempre aguerrido, que se adueñaba del centro de la cancha a base de fuerza y que en su momento desafió un sistema con tal de cumplir su sueño de jugar en Europa. Gerardo Torrado colgó los botines después de más de 20 años de carrera.
Dos décadas de servicio, siete clubes distintos en tres países diferentes. Torrado, de 38 años, puso la guinda a su carrera este domingo una vez que finalizó el partido entre el Indy Eleven y el North Carolina FC de la NASL. Hacer un repaso de todo lo vivido es complicado. Hay muchos recuerdos de por medio entre sus más de 600 partidos como profesional, en los que no cambiaría nada, ni siquiera la posibilidad de ser campeón de Liga, algo en lo que se quedó al límite con Cruz Azul hasta en cuatro ocasiones distintas.
“Mi carrera tal cual como fue me deja muy contento. Fue una carrera que disfruté mucho. Ha sido como ha tenido que ser. Fui campeón con la Selección, no fui campeón de Liga, pero sí de Concachampions y de Copa y si quisiera cambiar algo, a lo mejor se movería algo de atrás y no sería la misma carrera ni el mismo proceso. Mi carrera fue así porque así tenía que ser. Trabajé 20 años grandísimos y si pudiera escribirle una carta a Santa Claus, claro que se la escribía, pero eso cambiaría toda la esencia de mi historia y no sería la misma”, explicó en entrevista con ESPN Digital.
El ‘Borrego’ luchó sin cesar, sin detenerse no importando lo complicado que resultaba el desafío. A los 14 años le dijeron que no estaba hecho para jugar futbol; a los 21 salió de Pumas entre muchos problemas para ir a Europa y cumplir un sueño, a pesar de que el sistema intentó bloquearlo. Ahora esos recuerdos son meras anécdotas.
Leyenda. #GraciasTorrado pic.twitter.com/cFFv1fHpvv
— Indy Eleven (@IndyEleven) 29 de octubre de 2017
“Ha sido una experiencia fabulosa. Desde niño soñar con ser profesional e ir cumpliendo ese sueño paso a paso, trazando nuevos objetivos, ver la manera de conseguirlos. Los obstáculos muchas veces son grandes oportunidades para seguir creciendo y persiguiendo lo que buscaste desde un inicio. Los objetivos están para cumplirse y si son sólidos, tarde o temprano los vas a cumplir. A cada uno le va diferente y podrás quejarte, pero con el paso del tiempo he aprendido que no vale la pena quejarse, que hay muchas cosas positivas por destacar y lo he aprendido por el futbol. Estoy muy agradecido con el futbol”, aseveró.
De los mejores recuerdos en su carrera también estuvo su llegada al Cruz Azul, un club en el que militó más de la mitad de su carrera y en el que se convirtió en capitán.
“El paso por Europa. Desafiar un sistema para hacer valer tus derechos. Es algo que tengo muy presente y jugar en tres países diferentes. El día que ficho por Cruz Azul fue muy importante y hacerme referente de un club durante tantos años también es algo muy importante en mi carrera”, recordó un nostálgico Torrado, que ya prepara las maletas para dejar Estados Unidos y volver a México para ocupar el puesto de director deportivo de la Selección. El mundo alrededor del balón tendrá una nueva faceta.