El próximo lunes, Perú se jugará en Doha la chance de participar del Mundial de Qatar 2022. El decisivo partido ante Australia será apenas el 2do que la Selección dispute en la capital qatarí. Aquella otra vez, el 9 de septiembre de 2014, la Bicolor, que entonces conducía el uruguayo Pablo Bengoechea, venció 2-0 a Qatar en un amistoso que se definió en los minutos finales.
Aquel único antecedente en Doha se dio unos meses después del Mundial de Brasil, al que Perú no clasificó. El nuevo ciclo mundialista rumbo a Rusia 2018 comenzó con un amistoso ante Panamá, en Lima, en agosto. Luego, llegó esta gira por Medio Oriente, en septiembre. Unos días antes, Perú había vencido también 2-0 a Irak, en Dubai. Mientras, en Brasil, por los malos resultados Ricardo Gareca dejaba su cargo en Palmeiras y quedaba liberado para, en marzo de 2015, tomar el mando de la Bicolor para llevarla al Mundial.
Aquella noche catarí, en el estadio Abdullah bin Khalifa, Perú tuvo una formación particular. Salió a la cancha con George Forsyth en el arco. Luis Advíncula (lo reemplazó Pedro Paulo Requena), Hansell Riojas (Koichi Aparicio) y Alexander Callens en la defensa. En el medio, Yoshimar Yotún, Josepmir Ballón, Mario Alfonso Velarde Pinto (Hernán Hinistroza) y Rinaldo Cruzado (Benjamín Ubierna). Y, en ataque, Jean Deza (Víctor Cedrón), André Carrillo (Daniel Chávez Castillo) y Paolo Guerrero. En el banco se quedaron, Pedro Gallese, Miguel Trauco y Paolo Hurtado. En total, 6 son los jugadores del actual plantel, sin contar a Paolo, que estuvieron en aquel partido hace casi 8 años.
Fue un triunfo peruano más trabajoso de lo esperado. La Bicolor tuvo el control del partido desde el comienzo pero Qatar, protegido por una nutrida defensa de 5 hombres, lo complicó a partir de la pelota parada durante toda el 1er tiempo. El ataque peruano, liderado por Paolo Guerrero, se mostró activo y peligroso. Recuperó alto y tuvo chances pero careció de precisión para convertir.
Recién durante la 2da parte, Perú mostró el ritmo de juego necesario para llegar al gol. Fue clave el ingreso de Víctor Cedrón para conducir la ofensiva y darle más opciones de gol a Paolo, ese día capitán de la Selección. El entonces goleador de Corinthians tuvo 2 chances claras en 2 minutos, pero el arquero Saad Al Sheeb, que había ingresado en el entretiempo, conjuró el peligro y se transformó en figura. Con ese impulso inicial, las acciones de gol comenzaron a sucederse.
La entrada de Hinostroza, a los 77, aportó el pase gol que faltaba. Tanto atacó la Bicolor que, en el final, terminó por convertir. Primero, a los 84 minutos, una pelota parada de Hinostroza propició un cabezazo de Guerrero que el arquero detuvo a medias pero Alexander Callens la empujó de cabeza sobre la línea. Luego, a los 88, Hinostroza encontró un hueco en una defensa rival más abierta y Paolo tuvo su gol con un preciso zurdazo desde fuera del área. Incluso, en la última acción del partido, Guerrero pudo anotar el 3ro pero el poste se negó a mover el marcador.
Así, Perú cerró aquella gira por Medio Oriente con pleno de triunfos y sin goles en contra. Un buen antecedente para lo que se viene. Este lunes 13, Perú volverá a jugar en Doha. Esta vez sin Paolo, tendrá un partido mucho más importante que el de 2014. Frente a Australia, el equipo de Gareca buscará el anteúltimo boleto al Mundial de Qatar 2022.