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¿Enzo Fernández, el cinco de la Selección?

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Los cambios de Scaloni: todos los detalles del entrenamiento de Argentina (1:15)

El informe de Diego Monroig en F90 con las novedades del equipo en las jornadas previas al duelo clave contra Polonia. (1:15)

DOHA --(Enviado especial) Enzo Fernández es uno de los hombres del momento en la Copa del Mundo. Como Jude Bellingham, Jamal Musiala y Moisés Caicedo, el nacido en San Martín es uno de los mediocampistas jóvenes que ha terminado de explotar en Qatar 2022 y que ya se destaca como una estrella, por rendimiento, carácter y ascendencia en el equipo. Por eso, su ingreso a la alineación titular se impone, más allá de su poca experiencia internacional y de lo afianzado que venía el equipo antes del campeonato.

El hombre de Benfica hizo méritos para estar en la convocatoria por su capacidad de adaptación a cualquier ambiente, por más complejo que sea. Entonces, no parece descabellado que pueda ganarse un puesto desde el inicio, incluso en un conjunto cuya línea central salía de memoria. El problema es que ha sufrido una baja importante como la de Giovanni Lo Celso, que desarticuló el funcionamiento colectivo y que provocó el cambio de mediocampista central por el bajo nivel de Leandro Paredes.

¿Dónde encaja Enzo en la idea de Lionel Scaloni? En cualquiera de los tres puestos del 4-3-3. Sin embargo, hasta ahora lo ha utilizado casi siempre en el centro, justo en el puesto en el que menos jugó en River y en Benfica. De todos modos, lo conoce a la perfección porque fue su función durante buena parte de su carrera en inferiores y la ha desarrollado en diversos momentos de su vida profesional.

Disputó cinco partidos internacionales y en todos ingresó desde el banco. En cuatro de los cinco reemplazó al volante central, dos veces a Leandro Paredes y dos a Guido Rodríguez. No es difícil pensar que Scaloni y su cuerpo técnico lo imaginan más en ese rol que como interior. Por eso, no es descabellado imaginar un mediocampo de absoluta dinámica, con Enzo, Rodrigo De Paul y Alexis Mac Allister.

A veces, en los Mundiales es necesario saber cuándo cambiar para aprovechar los momentos. El carácter cambiante del fútbol obliga a tener la capacidad de modificar preconceptos y revisar certezas. Argentina llegaba con un equipo consolidado. Sin embargo, la tensión del debut y la presión nubló los sentidos y ocultó la fluidez acostumbrada. La aparición descontracturada de Fernández le devolvió frescura y esto debe ser explotado.

En dos partidos, Scaloni utilizó dos mediocampistas centrales de características muy diferentes. El futbolista con más minutos de juego en su ciclo, Paredes, fue titular contra Arabia Saudita. Como todo el equipo, fue víctima del desconcierto general y no jugó bien. Tanto así que perdió el lugar y ante México salió desde el inicio Guido Rodríguez. Él tampoco pudo afirmarse, por la naturaleza del partido, que exigía un rompedor de líneas más que un cinco posicional. El puesto está en entredicho y Enzo puede aparecer para disipar las dudas.

En River jugaba como interior pero muchas veces alternaba posiciones con Enzo Pérez, quien era el dueño del mediocampo pero sabía que contaba con un jugador superdotado a su lado. Marcelo Gallardo le otorgaba libertad para soltarse y su rebeldía era una de las claves del campeón 2021. En Defensa y Justicia fue donde le sumó virtudes a su repertorio en ese sentido: intensidad y dinámica contra la esquematización del sistema táctico. Él está para romper esquemas.

En Benfica, uno de los mejores equipos de la temporada europea hasta ahora, es figura tanto en el 4-2-3-1 como en el 4-4-2. En ambos casos juega con un hombre de mayor sacrificio y retroceso a su lado: Florentino Luis. De todos modos, Argentina está acostumbrada a jugar de otra manera, con un mediocentro de otras características. Por su capacidad de adaptación, inteligencia táctica y capacidad física, Enzo puede cumplir sin problemas la función de Paredes.

El otro punto clave para pensar en que sea titular es su enorme talento para el gol. Ha convertido 12 goles en 53 partidos en River y ya lleva 5 oficiales en Benfica. No solo marca por su gran pegada, sino también por su confianza de acero. Desde esa mentalidad, Argentina puede afianzar su crecimiento en el Mundial.