Feyenoord perdía 2-0 contra NEC en los octavos de final de la Copa de Holanda, hasta que entraron Paixão y Giménez para cambiar el destino de su equipo
Igor Paixão es actualmente una de las figuras de un equipo líder en una liga nacional en Europa, pero no todo fue fácil en la vida del joven de 22 años. Nacido en una comunidad quilombola de Amapá, el actual jugador del Feyenoord comenzó su carrera en el futbol cuando jugaba con una pelota de papel. Y fue rechazado por tres clubes importantes antes de finalmente obtener su oportunidad.
"Desde muy temprana edad ya me gustaba el futbol, entonces hacía pelotas de papel para patear. Mi sueño de convertirme en jugador se hizo realidad a los 7 años cuando entré en la escuela de futbol sala del Clube São José. Años después, realicé pruebas en Santos, Corinthians, Flamengo y Coritiba. Mi padre me inscribió en el examen en 2014, cuando tenía 13 años. Había 40 niños de diferentes partes de Brasil y yo fui el único que aceptaron".
En Coritiba, Igor tardó un tiempo en tener una oportunidad. Aún como jugador de categorías juveniles, fue cedido al Londrina. En la Serie B de 2021, el delantero ganó espacio y se convirtió en uno de los principales responsables de subir a la primera división.
El buen desempeño continuó en la primera mitad de 2022. Y el futbolista comenzó a llamar la atención de muchos clubes, tanto en Brasil como en el exterior. "Flamengo hizo un acercamiento, pero no hubo negociación. Otros grandes clubes de Brasil también me buscaron, pero yo creo que por estar a mitad de temporada no se realizaron negociaciones".
En ese momento, Igor estaba en la lista de nombres de Jorge Jesus, que acababa de hacerse cargo del Fenerbahçe, pero fue vendido al Feyenoord, que lo observaba desde hacía tiempo.
"La empresa que maneja mi carrera recibió contacto del Feyenoord a fines de 2021 para saber cuál era mi situación con Coritiba, cuánto tiempo era el contrato y las tarifas de transferencia. Y luego en abril o mayo de 2022, comenzaron las negociaciones iniciales para ficharlo. Siempre pensamos que jugar en Países Bajos y en el Feyenoord sería fantástico para mí. Estamos absolutamente seguros de que tomamos la mejor decisión".
Al principio, el brasileño sufrió con la adaptación, pero pronto comenzó a destacar. Hasta el punto de que el Feyenoord lidera actualmente una liga que tiene al Ajax y al PSV como grandes potencias. También fue el héroe de la clasificación para los cuartos de final de la Copa de Holanda, junto al mexicano Santiago Giménez. En el duelo contra el NEC, el brasileño marcó un gol en la segunda parte y luego anotó un penal decisivo, igual que el exdelantero de Cruz Azul, quien también ingresó para revolucionar el partido a favor del Feyenoord.
"Los primeros meses fueron muy difíciles en todo (idioma, cultura, club), pero ahora me estoy adaptando muy bien. Un campeonato muy diferente. La dinámica de juego, la táctica y mucha intensidad son algunos puntos. Tenemos una plantilla fuerte y unida. Nuestro entrenador viene haciendo un gran trabajo. Consigue mantener motivados a los jugadores y exige siempre el máximo de cada uno. Vamos en busca del título. Ese es el objetivo".
En Holanda, Igor Paixão conoció a un gran referente en su carrera: "Van Persie no solo es un gran ídolo del futbol holandés, sino del futbol mundial. Hemos trabajado con él. Fue un gran aprendizaje", señaló sobre el exjugador del Arsenal y del Manchester United, que actualmente es el técnico de la categoría sub-20 del Feyenoord.
FUTURO
Pese al poco tiempo en Europa, los tres goles y las dos asistencias en la temporada provocan rumores sobre que clubes más grandes ya lo buscan. Sin embargo, un traspaso, no está en la mente del carioca, que quiere disputar la Champions League la próxima temporada con el Feyenoord. "Estoy muy feliz aquí. Sé que todavía necesito mejorar mucho. Mi enfoque es total. La empresa que maneja mi carrera se encarga de los asuntos fuera del campo y mi enfoque es trabajar duro y evolucionar siempre. Mi siguiente paso es, sin duda, luchar por este título, sería mi primero en Europa. Jugar la Champions también sería genial".
Si no está en el plan un cambio de equipo, si lo es ser parte del grupo de jugadores de la selección brasileña para el Mundial 2026. "Sé que ser convocado para la selección brasileña es muy difícil, pero lo espero con ansias, sería un sueño hecho realidad".