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'Pollo' Briseño considera que algo le falta para ser llamado al Tri

El defensor del Feirense de la Primeria Liga de Portugal, Antonio Briseño, aseguró que “si no estás, es porque te falta algo”, sobre el porqué no fue convocado a la Selección Mexicana de Gerardo Martino para el debut del argentino ante Chile y Paraguay.

Expresó que en algún medio tergiversaron sus palabras en torno a porqué no está en el Tri, que vela armas para su primer cotejo en Estados Unidos, y aseguró que lo pintaron como una persona egocéntrica: “Es como si hubiera obligación de que yo estuviera ahí, y claro que no fue así”.

“Un llamado o no, las razones nunca las sabes porque son diferentes factores y al final el que tiene la decisión es el técnico y es por tu forma de jugar. Si no estás es porque te falta algo, es lo que yo dije: ‘Hay que analizar bien lo que se necesita porque a la selección llegan los mejores, no cualquiera’”.

Por otro lado, sostuvo el defensor que su objetivo a mediano plazo es figurar entre los mejores. “Lo que más me conviene como futbolista es seguir jugando, hacer buenos juegos; que el equipo se mantenga en primera división, que es lo más importante y, en un futuro, en unos meses, poder dar ese salto de calidad que todo jugador quiere”.

Sobre las diferencias entre la liga mexicana y la lusitana, respondió que en cuanto a la estructura de estadios y otros aspectos extracancha, no tiene nada que envidiarle, "lo que sí, las estrategias, y que muchas veces los entrenadores no tienen miedo a encerrarse atrás y jugar al contragolpe por su misma estrategia”.

Explicó que allá “no es mal visto” que un equipo grande deba encerrarse por momentos y dependiendo del rival, lo que sí pasa en la Liga Bancomer.

Briseño afirmó que en México se corre más rápido y se recorren trayectos de 11 o 12 kilómetros, mientras que en Portugal con dificultades se llega a 9 o 10, porque el futbol “es más posicional”.

Por otra parte, aseguró que mientras en México el futbolista puede conseguir un trato diferente al resto de la gente por el simple hecho de serlo, en el país luso “te tratan como a cualquier persona”, además de sostener que, a un jugador de un equipo sin mucho nombre, le resulta más difícil destacar que a uno que milita en un cuadro de prestigio.